Capítulo 10: Fiesta de Bienvenida

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Era la segunda clase del día, penúltima, ya que hoy saldríamos temprano para que se pudiera organizar bien la fiesta y estaba segura de que mi brazo en cualquier momento dejaría caer mi cabeza contra la mesa, no había podido pegar un ojo en toda la noche. ¿Saben quién tenía la culpa?

La estúpida ardilla con rabia.

Además todos estaban hablando y sus voces llegaban como miles de flechas al oído, parecía que tenía resaca después de una fiesta en la que bebí mucho, todos estaban hablando de la gran fiesta de bienvenida organizada por Courtney Adams, Ryan Langerfield y Kian Stone, nadie prestaba atención a la clase así que el profesor de álgebra dejó de intentar que nuestras cabecitas aprendieran algo el día de hoy y se sentó a leer 50 Sombras más oscuras, de la trilogía cincuenta sombras. Ugh.

En esta clase no había nadie con quien poder hablar a menos de que decidiera volverme loca y comenzar a hablar sola, Mason dijo que tenía Física, Jo tenía Química, Phoenix tenía Historia e Izzy tenía..... bueno la verdad no lo sabía, el punto es que en esta clase no había absolutamente nadie con quién hablar hasta que sonara el timbre para poder "salir corriendo" a la clase de Gimnasia. Habíamos planeado todo para escapar esta noche, los vestidos de fiesta para no llamar la atención, la vía de escape rápido del gimnasio y los boletos de avión que ahora tenía en mi mano, los estaba obsevando muy atentamente. No sabía adonde ir, pero tenía que ser fuera de Estados Unidos y mientras más lejos de mi familia, mejor, mucho MUCHO MEJOR. Tenía muchas opciones, pero ninguna me aseguraba mantenerme bien y para siempre con dinero, porque aún me faltaban dos años para ser mayor de edad, para ir a la universidad y eso también implicaba otro gasto, pero por nada del mundo volvería a la aburrida y gran casa en la que vivía hace menos de una semana, porque para mí la dispedida que di iba a ser la última, nada me hacía feliz allí, mi cabeza estaba por explotar, cada vez tenía más inconvenientes escapar de aquí.

Sonó el timbre y todos salieron animadamente del lugar, pero por el otro lado yo salí lentamente de allí y fui caminando a la misma velocidad hacia gimnasia

Cuando llegué al gimnasio, encontré al extraño profesor que teníamos, haciendo flexiones y gritando:

"¡Todos a los camerinos!¡Los quiero con la ropa de deporte en DIEZ MIMUTOS!"

Y todos los que entraban al gimnasio corrían a los camerinos haciendo caso a las órdenes que gritaba el profesor Wernecke mientras hacía su rutina de ejercicio. Entré a los camerinos, me cambie y salí junto con todos los chicos de mi clase de Gimnasia.

"¡Soldados! ¡En Formación!" Gritó. ¿Qué este tipo no podía decir nada NO gritando?

"¿Si sabe que esto no es un campo militar o fuerte del ejército?" Dijo Mason.

"¡Tú," Gritó apuntando a Mason. ¿Ven lo que les digo? Gritando "¡El teñido del fondo! ¡40 vueltas al gimnasio!" Gritó nuevamente y Mason abrió los ojos como platos.

"¿¡¿Cuarenta?!? ¿¡¿Acaso está loco?!?" Gritó Mason sin poder creerlo.

"Tienes razón... ¡¡¡Cincuenta!!! ¡¡Una palabra más y doblo la cantidad!!" Gritó y Mason salió corriendo enojado.

"¿El sujeto sabe que esto no es un campo militar?" Dije.

"¡Tú, la de cabello feo! ¿Algún problema?" Gritó apuntandome.

"Ninguno" Dije rápidamente, pero luego procesé su frase "¿¡¿Cómo que cabello feo?!?"

"¡Soldado! ¡20 vueltas al gimnasio!" Gritó.

"¡Son demasiadas!" Grité pero creo que mal interpretó mi comentario.

"¡Cincuenta vueltas! ¡Ahora! ¡O si no..."

Internado Ravenswood (EDITANDO)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora