"Adiós..." cap 25

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Es extraño ver que personas moribundas disfrutan más de la vida que alguien vivo, es decir, no digo que no “viva la vida” pero… la mayoría de las personas se amargan por cosas con solución. No digo que no se feo, es horrible estar amargado/a, pero… mi punto de vista es que hay problemas peores en cualquier parte del mundo, en cada minuto está muriendo alguien y al mismo tiempo nace alguien que podría tener una enfermedad. Un problema para estar mal puede ser tener un cáncer, o peor, un hijo con cáncer.

A veces me pongo a pensar y… me siento muy estúpida por hacer lo que hice, me corte, estaba muy furiosa y me desquite con mis muñecas, la ira no soluciona nada, solo empeora,  más si la usas en contra tuya.

Harry… es solo un chico, un buen chico, un lindo, seductor y buen chico, quiero recalcar que no es malo. Pero… creo que no nos merecemos uno al otro, n puedo decir porque con exactitud porque ni yo sé, pero eso es lo que siento…

Y... bueno pues… ya no me queda mucho tiempo, tengo un cáncer de hígado y según lo que escucho Liam en el laboratorio, creo que deciden suspender la quimio, eso hacen porque saben que no hay esperanzas…

Creo que desde el momento en el que se comenzó a caer mi cabello debí hacerme unos estudios… no estoy pelada, pero lo tengo bastante corto como para parecer enferma.

Me hubiera gustado vivir un tiempo más, pero no puedo realizar todos los sueños que anhelo, nadie puede, nadie puede a tan corto plazo de resto de vida, tantas cosas que me gustaría hacer o que pude haber hecho… pero no, todo se fue a la basura, mis seños, emociones, momentos, recuerdos y junto con todos ellos, también yo.

Creo que este es casi mi final… para pensar en positivo le pediré a Liam que me ayude a planear mi funeral, no quiero que haya colores que no me gustan, o que sirvan comida asquerosa, quiero que todo sea grandioso…

Liam entro a la habitación, estaba acostada, le di una leve sonrisa sin separar los labios. El parecía agitado, con algo que decirme…

-Tengo que decirte algo- dijo el, sentándose a un borde de la cama, tomando mi mano izquierda

-Si… igual…- di como respuesta, pero no termine la frase antes de que me interrumpiera

-Te amo-

-¿Qué?-

-M eh enamorado de ti desde el primer momento en que cruzaste la puerta del instituto, pero creo que se guardarme mis sentimientos- sonreí ante su comentario sobre ocultar los sentimientos –Tú fuiste la primera chica que tuve esto en común, y creo que fue un error porque te termine haciendo daño- trate de interrumpirlo, diciéndole lo contrario, el me hace bien, pero no pude decirle nada porque prosiguió con su relato –Amo como te sonrojas, amo como hablas, amo la manera subestimarte que tienes como tu concepto, no amo que hagas eso, pero amo la manera en que lo haces, es decir, eres linda pero no te crees “la linda”, y amo eso, amo cada parte de ti, la manera en que ríes, tus chistes sin sentido, amo eso y mucho más, y lo seguiré asiendo hasta el día en que me muera- en este momento lagrimas brotaban de mis ojos, pero esta vez no pude ni quise evitarlas, me canse de fingir. Liam era el chico al que estaba buscando.

No pude decir nada porque llego el doctor, y según el “tenía que llevarme de emergencia a hacerme una resonancia magnética… no estoy segura de lo que sea eso.

Pude notar la mirada triste de Liam, al parecer el sí sabía lo que era.

Me acostaron en una especie de camilla, y me metieron en una especie de tubo…

Una vez leí que la clave de las resonancias magnéticas es quedarse quieto, asique eso fue lo que hice. Me quede quieta, y relaje mi cuerpo lo más posible…

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-Linda, cariño, despierta- Abrí lentamente los ojos, al ver los ojos rojizos de mi madre, mi preocupación aumento un 35%

-“Todo lo malo trae algo bueno ¿verdad?”-

-“Así es linda”-

-“Tus palabras son reconfortantes, pero no creo que el cáncer traiga nada bueno”-

-Linda… tengo… tengo que decirte algo”- su voz quebradiza se hacía más notable al tener el llanto cada vez más cerca, no tenía idea de lo que pasaba –“Los doctores han decidido dejar la quimio”-

-“¿Qué? ¿Por qué? ¿Tan mal estoy?”-

-“Linda… todo es por algo, así quiere Dios que sean las cosas. Yo te seguiré amando ¡siempre!”- Resalto lo de “siempre” –“No importa lo que pase”-

En este momento fui yo la que no pude contener las lágrimas…

Ahora recuerdo todo…

Esa estúpida sensación de no saber cuál es tu diagnostico en el doctor… no saber si es peor estar rodeada de gente con iguales o peores problemas que tú, o que tu resultado sea muerte… las únicas palabras que están repetitivamente en mi cabeza son MeQuieroSanar MeQuieroSanar MeQuieroSanar… a veces uno no piensa en su salud, más que cuando le hace falta. Yo por ejemplo cuando pensé en practicar boxeo nunca pensé las consecuencia, y puse en riesgo mi cuerpo… un riesgo tan grande que hasta me hace dudar de mi vida, a un porcentaje de 90% de probabilidades de muerte

Ojala hubiese pensado en esto antes que pasara, pero al menos esto tiene una lectura, “Por algo paso” y algo aprendí. A veces la violencia no es la mejor opción, cuando a veces ni siquiera la es. Pero le doy gracias a Liam de todos modos, con el aprendí muchas cosas que podía hacer, que si no fuera por él, jamás lo hubiera sabido…

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-“Liam…”-

-“¿Qué cariño?”-

-“Tú me amas ¿verdad?”-

-“Más que a mi vida”- sus palabras me hicieron sentir maravillosa, me hicieron sentir viva, pero… a la vez me sentía muerta… Lo que Liam me dijo me dio fuerzas para… serrar mis ojos en paz…

In the hospital room 128 (Liam Payne y tu)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora