The Truth Untold - KookV

Capítulo 6: 'Eres Mío.'

ATENCIÓN: El siguiente contenido es un tanto explícito. Así que sino lo soportas o no te gusta, te pido que no lo leas. Gracias. KookV.

Narración por Jungkook:

Y ahí estábamos los dos, besándonos con aquella pasión que tanto nos caracterizaba. Mi mano en la nuca de mi chico haciendo presión para que sus labios y los míos no se separaran, mientras que llevo mi mano libre a su cintura pegandolo a mi cuerpo. Quería tenerlo lo más cerca posible de mi.

Empiezo a caminar lentamente sin soltarlo y de un rápido movimiento, ambos caemos a la cama, causando que yo quedara sobre él. Mis labios se separan para tomar aire nuevamente y acaricié su mejilla. Al ver que sus ojos se cierran, quedando tan vulnerable hacia mi, no resistí y volví a besarlo.

Habían pasado meses desde la última vez que estuvimos en una situación así, y sentía que debía de ser cuidadoso con él. No quería herirlo.

Así que, tomé su camiseta, quitándosela y ataque su cuello con suaves besos sobre su piel. Cuando siento que me abraza y que sus manos acarician mi espalda con suavidad, pude sentir un escalofrío recorrer todo mi cuerpo, cosa que me hizo sonreír.

—Jungkookie...-Me separé al verlo cuando mi chico dice mi nombre de aquella forma. Demonios, amaba cuando me llamaba así, lo hacía ver el doble de adorable.- Intentemos no hacer mucho ruido, recuerda que nuestra habitación está pegada a la de Suga y Jimin. Y no quiero que en la mañana comiencen a molestarnos. -Dice agitado mientras que acariciaba mi mejilla y yo cierro los ojos ante su tacto.

—Está bien, no haremos ruido. -Y luego de decir aquello, mis labios atacan los suyo nuevamente. ¿Cómo era que no podía estar ni un segundo sin besarlo?

Mis manos se deshacen de su pantalón junto que las suyas hacían lo mismo con los míos, y en un abrir y cerrar de ojos, ambos estábamos desnudos.

—No tenía idea de que esto sucedería, así que, no traje preservativos. -Lo acosté boca abajo dejando su completo trasero a mi vista y lentamente empiezo a rozar me contra él.- Así que la sensación será mayor, pequeño. -Mi voz estaba completamente ronca y mi respiración agitada por la excitación.- Muerde la almohada, esta será una buena manera de no hacer ruido. -Y dicho esto, me hundí en él con lentitud.

Aquel chillido proveniente de la garganta de Tae, fue cubierto con la almohada y yo apreté mi mandíbula cerrando mis ojos mientras que un gruñido salía de mi garganta.

Al apoyar mis manos a los lados de su cuerpo sobre el colchón, comencé a moverme lentamente dentro y fuera de él. Sus manos apretaban aquella almohada con fuerza y cuando bajo a besar su hombro, pude notar que sus ojos se mantenían cerrados con fuerza aún gimiendo contra la almohada.

Sonreí con satisfacción al verlo y bajé mi cuerpo haciendo que mi pecho quedara pegado a su espalda, y me hundiera completamente dentro de él. Cuando tira la cabeza para atrás y quita su almohada de la boca, llevé una de mis manos a esta para cubrirla, y ahogar el gemido que iba a casi gritar.

Mis labios atacan su cuello al ver que tenía mayor visibilidad y puse mi mano libre sobre el dorso de la suya para entrelazar los dedos de aquella forma.

El único sonido que se escuchaba en la habitación, era el pausado sonido de la cama de madera gracias a mis embestidas y el pausado sonido de nuestros cuerpos chocar.

—Demonios, Taehyung...-Gemí suavemente ronco sobre su oído y escondí mi rostro en su cuello ahogando mis gemidos ahí.

Mi nombre no paraba de salir de los labios de Tae y eso, hacía que mi piel se erizara.

—Jungkookie...-Gimió mi nombre nuevamente y eso hizo que perdiera mis estribos. Volví a levantar mi cuerpo tan solo un poco, para comenzar a clavarme con fuerza en él, haciendo que el respaldo de la cama chocará contra la pared.

—Eres mío y tienes que saber eso. -Digo de manera ronca cierro los ojos sintiendo aquellos quejidos del chico debajo de mi.

En un rápido movimiento, salgo de él y lo giré haciendo que quedara boca arriba. Al tener una vista completa de él, vuelvo a hundirme en él con fuerza y lo besé ahogando aquel fuerte gemido listo para salir de la boca de Tae.

Sus uñas se clavan en mi espalda con fuerza, sintiendo un poco de ardor gracias a este acto, siento que mi pelvis comienza a frotarse contra su miembro con cada embestida que daba. Su espalda se arquea y se aferra a mi con más fuerza.

Bajé mis besos a su barbilla, aquella barbilla que me volvía loco y comienzo a besar, y mordisquear esta con mayor placer.

La cama seguía sonando y el respaldo contra la pared, también. En estos momentos, no me importaba que mañana comenzaran a molestarnos con sus bromas, en estos momentos, solamente quería disfrutar de cada parte del hombre que me encantaba.

Estábamos en el mayor extasís, él gimiendo mi nombre gracias al placer y yo admirando como se ponía gracias a mi. Me gustaba sentirme poderoso sobre él, y también sabía que a él le gustaba que yo actuará de esta forma. Aunque luego de esto, muchas veces él se ponía nuevamente en su lugar de Hyung. Pero amaba que no lo fuera en estas situaciones.

Su cuerpo comienza a ponerse tenso, y ahí entendí que el roce de mi pelvis contra su erección estaba haciendo un gran trabajo, pero quería más. Así que tomé su erección con mi mano y sin dejar de moverme dentro de él comencé a masturbarlo con rapidez.

Sus manos vuelven a apretar las sábanas en forma de puño con fuerza y un gemido bastó para darme a entender que había llegado al orgasmo. Solté su miembro con cuidado y comencé a moverme más fuerte al sentir mi cuerpo tenso.

Mi vientre bajo se comprime sintiendo una fuerte ola de calor y escondí mi rostro en su cuello al momento que me vengo en él. Sus manos me abrazan con fuerza mientras que una de ellas acariciaba mi cabello intentando tranquilizarme.

Y así fue, después de tantos meses, ambos volvimos a unirnos en un acto de amor, y realmente fue candente. La necesidad de ambos, hizo que estuviéramos un poco desesperados, pero disfrutando el uno del otro como lo habíamos hecho anteriormente.