El chico de ojos rojos

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Las chicas del internado se aseguraron de que las tortugas ninja/fuerzas especiales no estuvieran cerca al salir nosotros y dado que mi casa era la que estaba más cerca del centro nos fuimos a esa para poder bañarnos y poner la ropa en la secadora.
En el trayecto Liz comenzó a cantar una canción que si bien yo me la sabía no lo hice por precaución de que mi padre, el teniente Corvalán, podía estar cerca. Lo divertido de aquella canción es que hablaba sobre follarse a un milico hueco porque quería estudiar, pasan que cosas ¿No?.
Bueno al llegar a mi casa por suerte no había nadie así que fui a la pieza de mis padres para sacar la bolsa de ropa que este quería botar y estaba buena para ver que le podía caer a Ojitos bonitos o que Rubén podía usar por mientras su ropa se secaba. Finalmente todos con un cambio de ropa y las otras prendas en la secadora nos pusimos a hablar de nuestras vidas, bueno, como odio hablar sobre la mía solo escuchaba y asentía, es que ¿Qué podría decir? En mi familia habían discusiones todos los días, cada 11 de septiembre mi padre me hacia entonar el himno nacional por "nuestro general" y yo no estaba de acuerdo con eso, podría mencionar cuando mi padre mató a mi hamster porque estaba amando a un roedor y "el amor es para débiles" pero hay gente peor que yo y no se queja, Felix no tiene casa y se ve contento dentro de lo que cae.

-Vale ¿Tú qué crees?

La voz de Liz me distrajo de mis pensamientos, no sabía de que hablaban lo que hizo reir a Ojitos

-Hablabamos sobre lo tirado que nos tienen en los albergues a los que no quieren ir al SENAME y así prefieren vivir.

El SENAME no era etiquetado como una buena opción para vivir así que solamente di mi punto de vista, en cuanto terminé de hablar la secadora sonó indicando el fin de su trabajo. Fui a esta y les entregue a cada uno sus ropas para que rápidamente se vistieran.
Rubén recibió una llamada de la FEUACh* indicándole que debía ir rápidamente a la universidad para arreglar unos asuntos lo que hizo que Ojitos y yo nos quedáramos solos.

-Te quiero agradecer por la ropa y todo esto, desde que vivo por mi cuenta pocas personas me han ayudado de verdad- Lo miré a los ojos intentando no perderme en el rubí de estos
-Tranquilo, si puedo ayudar lo haré, e incluso si quieres podríamos ir a dejar toda esta ropa al albergue y así ayudar a tus amigos
-Eres un ángel ¿Lo sabías?

En cuanto lo escuché decir eso me mordí el labio para no sonreír y así disimular un poco.
Pusimos toda la ropa en una maleta, fuimos a la catedral que era donde él se estaba hospedando desde hace ya un mes y en cuanto llegamos muchas personas se acercaron felices de poder recibir algo para calentarse este frío invierno.
¿Recuerdan que les dije que este chico cambiaría mi vida? Siempre fui una egoísta de mierda pero al verlo a él solo con un poleron y jeans me hizo reflexionar sobre eso...
Ojitos bonitos recién te conozco y ya me estás cambiando.

FEUACh: Es la organización de los estudiantes de la Universidad Austral de Chile ubicada en Valdivia (Isla Teja y Miraflores)