From Yellow to Green.

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El silencio en verdad no existía, ya que sus compañeros de cursada hablaban entre ellos, y una suave musica clásica sonaba de fondo, entre los sonidos de pisadas, de hojas de libretos siendo pasadas; nimios detalles que pasaron a ser prácticamente inexistentes en cuanto sus ojos avellana percibieron cierta cabellera pelinegra perteneciente a un bonito chico, que llegaba junto a su grupo.

No podía creerlo, y sin embargo debía de hacerlo.

TaeYeon bajó la mirada un tanto apenada, y él, pues, estaba muy sorprendido y su corazón golpeteó con fuerza en su interior.

¿Cómo iba a saber que Jung estaba entre el grupo de los que iban al taller de teatro los Lunes?
¿Cómo iba a saber que existía la posibilidad de que precisamente ese grupo sería con el que colaborarían en los siguientes tres meses para presentar una obra antes del fin de curso?

¿Se podía desaparecer del mundo por medio año?

Ese último mes había sido verdaderente extraño.
Todo desconcertaba a la mente y el corazón de TaeHyung.

Y es por eso que en ese momento, en el receso del almuerzo en la escuela, chillaba recostado en las piernas de su mejor amigo, estando también JungKook, su adorable dongsaeng de dos cursos menos, quien ya estaba al tanto de lo que sucedía, y solo reía por el berrinche sin sentido que hacía TaeHyung.

—¡No puede ser, Hyung! —Decía cubriendo su rostro, sin ver que Jimin ofrecía de su comida a JungKook en la boca en una escena que de seguro le hubiera sido en extremo adorable, y lo cual habría comparado con algún animal del cual supiera.

—¿Qué es lo que no puede ser? —Preguntó el mayor de los tres, y Kim bufó.

—Es guapo, su sonrisa es hermosa, sabe cantar, baila, actúa ¡Ayuda a los animales, Hyung! ¡Cuida de los animalitos! ¡Hasta lo he visto ayudando a una señora a cruzar la calle! —Fingió un lloriqueo que provocó una risa en su dongsaeng, y entonces Kim descubrió su rostro para mirar a JungKook con el ceño fruncido, sin lograr más que el que Jeon se encogiera de hombros. —Te odio Jung Hoseok...—Bramó sin siquiera creerlo él mismo.
—Nah... —Habló JungKook molestando a Taehyung. —Te gusta, y mucho. —Kim no pudo negar nada, no quería mentir -de nuevo-. Y mordió su labio sin saber qué hacer.

—Adivina qué más... —Jimin sonrió pícaramente y TaeHyung clavó sus ojos en él, desde su posición. Park volvió a compartir de su comida con JungKook, pero Kim no pudo centrarse en ello al oír lo que su Hyung tenía para decirle. —Su color favorito es el verde...

Y todo exploto allí, aún peor.
Y las mejillas de TaeHyung se colorearon de rojo.
Y no pudo dar vuelta atrás en lo que a sus sentimientos por ese chico respectaba.

—¡Incluso tenemos el mismo color favorito! —Lloriqueó y sus dos amigos rieron de él.

Comieron por un momento más en silencio, y lejos, en unos bancos a la distancia, JungKook pudo percibir a Hoseok llamando a TaeYeon, y, por supuesto, no lo dejó pasar.

—Tae, mira. —Dijo tocando el hombro del aludido para que se incorporara y observara la escena.

Kim frunció el ceño.
Y se molestó en sobremanera al ver que de una expresión de sorpresa, ante lo que fuera que haya dicho Hoseok, pasó a dibujarse una sonrisa triste en el rostro de su hermanita.

From Red To Love •°Donde viven las historias. Descúbrelo ahora