El CUERVO NEGRO

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CAP 2 EL CAMBIO 

Me desperté con  un sobresalto al oir sonar la canción Last Friday Night de Katy Perry. Así que de forma rápida cogí el teléfono y descolgué.

-¿Si?-dije con voz cansada-

-¡Hola!-dijo Miriam con voz animada-

-Mir, estaba durmiendo-dije molesta-

-Son las doce-dijo Miriam con voz confusa-

-Ayer llegué a mi casa a las 5, lo que no entiendo es el como tú estás despierta-dije yo

-Fácil, yo soy una persona llena de vida, estoy hecha para la fiesta  y además, me acabo de levantar –dijo ella sobreactuando-

-Eso tiene más sentido-dije con burla-

-Por cierto, ¿sabes dónde está mi sujetador negro?, me lo puse ayer y vine a mi casa sin él-dijo ella confusa-

-Em… -dije

-Siempre pierdo los sujetadores en las discotecas,  si es que hay que ver-dijo Mir-

-Si no te enrollaras siempre con uno en las discotecas,  yo creo que entonces los sujetadores seguirían en su sitio-dije yo

-Bah! ¡Qué más da!-Dijo Miriam quitándole importancia-

-Pues, ¡no te quejes si luego se te pierden!-dije yo

-Ya ya…por cierto hoy hay partido entre nuestro insti y el de McMarry, ¿te vienes?-preguntó Miriam-

-Pues vale… ¿a qué hora?-pregunté

-Nos vemos dentro de veinte minutos en el aparcamiento del insti, chao-dijo Miriam-

-Pero, Mir…-No pude terminar,  ya que ella colgó-

Genial, ahora solo tenía 20 minutos para arreglarme.

Rápidamente, me di una ducha de 10 minutos, después me puse unos pantalones rojos y una camiseta corta de tirantes de color azul claro con volantes, unas convers negras, me maquillé y salí de mi casa como un rayo.

Cuando llegué me encontré como siempre a una Miriam sonriente, saludándome.

-Hola,  Ros-dijo Miriam sonriente-

-Hola Mir, ¿vamos?-dije-

-Claro, ya he comprado las entradas, ah,  por cierto,  me debes 5 dólares-dijo Miriam-

-Vale, toma-dije mientras sacaba mi monedero para entregarle el dinero-

-Graciaaas-dijo Miriam-

-De nada, anda, vamos que a este paso no vamos a llegar-le dije a Miriam con una sonrisa-

Compramos dos refrescos, una bolsa de palomitas en un puesto y finalmente nos sentamos en las gradas.

Tras dos horas de partido, nuestro equipo  ganó 5-3.Nosotras,  bajamos por las escaleras  que había en las gradas, aunque, cuando miré hacia donde había un gran pelotón de personas pude ver parado a un chico rubio de ojos azules mirándome…

No puede ser…pero si es el mismo que el de la discoteca…

Vale esto es muy raro, inmediatamente, aparte la mirada. Él estaba hablando algo por teléfono, mientras me miraba. Finalmente tras unos segundos volví a fijar la mirada en él, pero…ya no estaba.

Creo que me lo he imaginado, es imposible que alguien haya desaparecido de forma tan rápida, lo que pasa es que estoy algo paranoica con lo que paso ayer, sí eso debe ser.

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