Capítulo 01

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LUNES

Definitivamente el invierno es mi estación favorita del año, ya que eso significa navidad, quedarme en casa sin escuela por las nevadas, leer mucho todo el día y sin los molestos mosquitos. Amo esta época aunque no sea fanática de salir a jugar en la nieve porque odio las manos congeladas, que la nariz se me ponga roja por el exceso de frío y sobretodo porque cuando salgo el sol se refleja en la nieve y la luz me deslumbra debido a la condición que me afecta provocándome mucha sensibilidad en los ojos.

Tengo un ojo color café oscuro y otro verde, raro pero cierto. Se llama Heterocromía, o al menos eso fue lo que les dijeron a mis padres cuando nací, pero yo no creo que ese sea mi caso ya que cuando tuve conciencia de mi misma me puse a investigar al respecto y descubrí que nunca suele surgir desde el nacimiento colores distintos en los iris, de manera congénita, sin tener como consecuencia más adelante la aparición de enfermedades como "el ", pero cuando empezaron a aparecer esos nombres de enfermedades tan extrañas en los sitios donde buscaba decidí dejarlo estar ya que yo me encontraba totalmente sana a mis 19 años y nunca había sufrido de nada grave más allá de los resfriados comunes al crecer. Siempre he pensado que se trata de algo más pero no lo he descubierto aun.

En fin, tenía que vivir con eso por más que yo no lo quisiera. Algunos dirán que debe ser genial tener colores distintos en ambos ojos pero habrá personas a las que no y personalmente me considero parte del segundo grupo, no es que me considere alguien negativa al respecto porque antes no lo era, pero al crecer y enfrentar etapas en mi vida en las que los demás no eran tolerantes me hicieron sufrir momentos en los que desee no salir de casa de nuevo.

En primaria no tenía amigos ya que a todos les daba miedo siquiera mirarme directamente. Llegue a secundaria y me había hartado de los comentarios de personas ignorantes a mi alrededor así que empecé a usar lentes de contacto para no llamar la atención y básicamente pasar desapercibida, ocultaba para los demás el verde que contenía uno de mis ojos y dejaba que el color tan común como el café que poseía mi otro ojo fuera el protagonista.

Siempre fui muy cerrada ya que mi autoestima no era la mejor debido a mi pasado, pero conocí a la que ahora es mi mejor amiga el primer día de clases en secundaria y fue como si hiciésemos clic, es como mi hermana, su nombre es Chloe y es fabulosa, también ese día conocí a mi otro mejor amigo que se llama Nathan, actual novio de Chloe, sonara raro pero a pesar de su relación aun somos muy unidos y prácticamente nada cambio a excepción de su estado en Facebook. Solo ellos y mi familia son conscientes sobre el color que se esconde tras los lentes de contacto y ni lo pensaron dos veces para apoyarme y siempre lo han hecho.

Actualmente aún falta un semestre completo para que el verano hiciese acto de presencia y tuviésemos vacaciones. Apenas estamos retomando las clases luego de unas semanas de descanso por Navidad, se puede notar la pesadez en el ambiente al ser enero pero eso solo ocurre en el instituto porque el resto de la ciudad parece más que animada habiendo recibido el año nuevo que comenzaba mientras quitan las decoraciones navideñas y preparan las cosas para San Valentín, así es la ciudad de Portland, Oregón.

Camino hacia el instituto escuchando mi música para relajarme ya que cuando usualmente llego allá el silencio y la paz se acaban por completo. The night we meet de Lord Huron suena en mis oídos cuando estando a unos metros de la entrada de la escuela alguien baja mi gorro de lana hacia mis ojos tapando por completo mi vista.

– ¡Demonios!– exclamo riendo cuando volteo quitándome el gorro de la cara y también apartando mis audífonos.

Mi mejor amiga ríe mientras me abraza, le devuelvo el abrazo mientras me dice – Hace tanto que no te veo que parece que estas más alta y todo.

Heterocromía (EN PAUSA)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora