Rendirse no es una opción

Prólogo

Samantha Thompson era una joven humilde, alegre, divertida y solitaria, su vida se complica tras la muerte de sus padres; quedando así a cargo de su hermanita. Ellas son de clase baja por lo cuál, se ve a la obligación de bailar en aquel tubo y quitarse la mayoría de su ropa en frente de hombres y todo para pagar los tratamientos y quimioterapias de Jenny.

Dereck Johnson es el típico playboy, es divertido, mujeriego, tiene un ego muy alto y es millonario, aunque con un pasado trágico.

Hasta que un día la vida de ambos cambia; cuando a Sam se le asigna ser la tutora de él, para ella él es todo lo que no quiere en su vida.

Ambos son polos opuestos pero... los polos opuestos siempre se atraen.

¿Qué pasaría si Sam se enamora de Dereck y él de ella?

Pero aún peor, ¿Qué pasaría si Dereck descubre el secreto de Sam?

-¿De-Dereck qu-qué haces a-aquí?

-¡¡Eso debería preguntarlo yo Samantha o como todos te llaman "Luna Ardiente"!!

-No es lo que crees, yo puedo explicártelo por favor

-¡¡¿Qué me tienes que explicar?, ¿que eres una maldita prostituta que se desnuda y se acuesta con todos?, Ahora veo que sólo fui tu puto juguete y seguro te burlabas de mi por lo idiota que fui y sabes que más; nunca en la vida te voy a perdonar eres una maldita y una perdedora me das asco Samantha...!!