¿Cómo sería Seokjin presentándose ante tu familia? ¿Alguna vez has pensado cómo sería Yoongi si fuera tu compañero de clases? Entra a este libro y verás variadas reacciones de los miembros de BTS ante diversas situaciones.
→ ¡pedidos abiertos!
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Pedido por: ludmila1122 Ésta es la parte 1, más tarde publicaré a los miembros que me faltaron.
Namjoon
Regresaste a la casa con lágrimas en los ojos, te sentías muy mal por no haber ingresado a la universidad. Nam, al escuchar tus sollozos, decidió acercarse a hablar contigo.
—Baby, ¿qué pasó? ¿Ingresaste? —dijo atento a tus movimientos.
—Yo... No entré, maldición. ¡Todos estos meses esforzándome en la academia para dar el examen y que me digan que me faltó un punto! ¡Un mísero punto! —tu voz cambió de triste a una tonalidad más enojada.
Tu novio te abrazó suavemente, haciendo que te calmes y reemplazando esos sentimientos de ira por otros de tranquilidad.
—Hey, tranquila, preciosa. Lo hiciste muy bien, de eso estoy seguro. Además, puede ser una señal de que ingeniería no es lo tuyo, y que deberías empezar tu carrera de cantante.
—Nam, sé que lo haces con buena intención, pero no estoy para ilusionarme por ahora.
—Oye, ¡pero es cierto! El gerente de mi agencia te oyó cantar ese día que viniste a mi estudio, y dijo que estaba interesado en reclutarte como trainee.
—¿¡Qué!?
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Seokjin
Habían pasado muchos meses sin ver a tu novio, Seokjin, y extrañarlo te torturaba, pues no te gustaba decirle que lo necesitabas ver, sentir su presencia y besar sus suaves labios, pero ésta vez ya no podías más con la espera.
llamada entrante
—¡Seokjin! Hasta que contestas, te he llamado muchas veces. —dijiste algo enfadada, pero la verdad es que tenerlo al teléfono te alegraba demasiado.
—Lo siento, jagi. ¿Cómo va todo en Seúl?
—Todo está bien, pero... —tu voz ya no daba para más, pues lo extrañabas, y saber que faltaba mucho para verlo te entristecía.