Llegué al sitio donde quedé con los demás, estaba nerviosa. Llegó Raoul.
—Hola Miri! – Se lanzó a mis brazos y me besó la frente. – ¿Estás bien? Te veo nerviosa.
¿Qué hago? ¿Se lo cuento? ¿O me mato ya?
—Raoul, si te digo algo.. ¿me tratarás como una loca? – frunció el ceño. – Acabo de descubrir lo que son los fanfics.
Puso los ojos en blanco.
— ¿Me lo dices o me lo cuentas? Yo leo muchos de ragoney. – Me miró extrañado. – ¿Tu de que has leido leona?
—¡De todo! O se ha leido warmi, ragoney...– hice una pausa.– pero el shipp que más me toca es Amiriam.
El se descojono en mi cara.
— Miriam eres tonta. – le di en el hombro. – Gilipollas que me has hecho daño. – se sobó el hombro. – Entonces ¿Estás rallada con eso? – Asentí.
— Pienso mucho en... – hice otra pausa. Pense en la sonrisa de Amaia. – Pienso muchísimo en Amaia y no se por que no me lancé en la academia.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
— ¿Ves? Por eso dije que eres tonta. – ¿De qué hablaba? Yo le miré con cara de impaciencia y el siguió hablando. – ¿Sabes que Amaia a mi me dijo que se fijó en ti antes de que se fijase en Alfred? – Me acarició el hombro. – Me contó que si os hubieseis besado en la gala de la fiesta cantando el "No puedo vivir sin ti" no habría existido Almaia.
— ¿Enserio? – se me cayó el mundo encima.
¿Por qué cojones le hice esa cobra? Ah... Por Pablo, no quería que eso lo viese.
"Dios mío" susurre mientras pase la mano por mi pelo nerviosa.
— La tenías loquita por ti, no dejaba de mirarte. – me miró enternecido. – Siempre tenia sus ojos puestos en ti a cada momento. Le gustabas y mucho. – Sonrió. – Ahora ya no lo se por que no volvimos a hablar del tema. Solo me lo contó a mi y yo le guardé el secreto.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
