Narra James.
-No te ves de muy buen humor que digamos hale ¿pasó algo?- Mi amigo de toda la vida, Carlos , me miraba fijamente para poder descubrir que había pasado odiaba que me conociera tanto.- Lío de amores ¿cierto?
-Acaso eres tonto.- No le podía esconder nada a él pero a la vez era peligroso.- Es solo que odio venir a este tipo de reuniones, mucha gente y la mayoría es pura hipocresía
-Así es nuestra vida hermano, aunque si seré sincero estas fiestas no están tan mal.- Con la copa en mano señalo a un grupo de chicas que nos miraban desde la puerta de la residencia de los Payne.- Admito que los Payne tienen buen gusto para los interiores
-Eso era de esperarse ellos son dueños de una de las compañías de arquitectos y construcción más grande de la Unión Europea, es obvio que tienen que tener una casa grandiosa
-Tiene sentido, pero si lo vemos de esa manera tu eres el heredero de un imperio financiero, Hale’s Co. es la franquicia de banco más grande de la Unión Europea
-Me da igual.- Los títulos sociales, ni quien tenía más dinero me daba lo mismo para ser sincero.- Eso es irrelevante.
Mientras Carlos examinaba el interior de la casa me lleve la copa de champagne a los labios y mire al grupo de chicas que nos observaban a la distancia, no estaba buscando un polvo ni un “rapidín” ni mucho menos pero necesitaba un ligue casual para poder quitarme de la mente la sensación e imagen de Keith debajo de mi con ese vestido
-No sabía que Malik, Payne, Styles y Tomlinson fueran amigos cercanos de Keith.
-No lo son ¿Por qué lo dices?
-Mira.- Aleje la mirada de la pelirroja que me miraba de arriba abajo y sonreía coquetamente, sonreí pícaramente para devolver el favor pero mi sonrisa desapareció después que ver a lo que Carlos se refería.
Keith estaba en medio del grupo de Malik, Payne, Styles y Tomlinson sonreía y parecía que estaban en una plática interesante ya que ella los miraba con los ojos ligeramente abiertos conocía esa expresión era misma que hacia cuando hablaba con Rachel o Carolina en la escuela o cuando hablaba con mi mama sobre sus aventuras cuando estaba en Estados Unidos. Quería ir a ahí, tomarla de la mano y llevármela lejos de esos tipos pero sabía que no debía hacerlo, las ganas de hacerlo no me faltaban, tome la copa con más fuerza.
-¿Pasa algo? Hermano si no sueltas esa copa la romperás.- Afloje mi agarre del cuello del vaso
-Vayamos con aquellas chicas, la pelirroja llamo la atención.-
-Eres un bipolar.- Dijo entre risas mientras dejábamos las copas en una mesa y caminábamos hacia las chicas
Necesitaba distraer mi atención.
Narra Keith
-No mientas Louis muy bien sabes que tú fuiste el que le puso el sapo en la mochila a Lisa Nichols en 5 año.- Decía el ruloso Styles mientras señalaba al ojo-azul Louis Tomlinson, todo mundo reía.- Ella grito tanto que recuerdo que al día siguiente no fue a la escuela porque no podía hablar
-Si se la puse no lo niego pero fue porque tú me dijiste que lo hiciera.-
-Para que me hacías caso.- Harry Styles era el hijo del dueño de empresas Styles, una casa de modas, su madre y su padre provenían de familias de sastres desde el siglo XV, era irónico pensar después de todo su apellido encajaba perfectamente con el concepto de su empresa pero por lo que sabía él prefería los autos que la moda.
Louis Tomlinson era el mayor de sus hermanos y su familia corría una empresa de aviones de fama mundial, su mayor anhelo era ser un piloto y pensaba dejar a sus hermanos más chicos a cargo de la empresa y forjar su propio camino.