Felicidad o sufrimiento [Choni]

Capítulo 1

Me levanto por el sonido molesto de la alarma, aquí vamos un día más, otro día donde tengo que fingir que todo está bien cuando todo es una mierda.

Decido levantarme de la cama y voy al frente de espejo, tengo un Mancha morada en mi cara para ser exactos en mi pómulo, tengo un morete en mis costillas otro más abajo, en mi brazo, La verdad es que tengo tantos que da hasta pereza contarlos.

Cojo una toalla y me meto al baño, Es tan difícil levantarse día tras día y saber que todo es siempre igual, que me molestan y me golpean Sólo por mis preferencias sexuales, que todos los días me hagan burla sólo por mi estatura y me digan cosas como "pequeña lesbiana" o "bebé homosexual" saber que son los que se hacian llamar mis amigos hace unos años los que hecen todo esto después de que decidi confiar en ellos y contarles sobre mis preferencias.

Saber que puedes ser una persona feliz un día y para el otro ser la persona más infeliz del mundo.

Salgo del baño y me pongo cualquier cosa la verdad es que ya me da igual lo que visto o no estoy tan acostumbrada a que todo siempre termina o lleno de barro o con sangre, lavo mis dientes y salgo de mi cuarto voy bajando las escaleras y paro en la última grada cuando escucho las voces de mi familia.

Dibujo una sonrisa en mi rostro y entró a la cocina, ahí estaba mi madre, mi padre y mi pequeña hermana.

-Hola pequeña- me dice mi papá cuando me vio en la puerta de la cocina.

-Hola papi- le digo tratando de sonar un poco feliz.

Me siento en la mesa tratando de que no se noté mi cara de dolor por causa de los Moretones en mi cuerpo, cuando logró sentarme mis padres empiezan una charla sobre sus trabajos ya que son dueños de una empresa importante, la verdad tenemos mucho dinero pero a mi casi no me gustaba mencionarlo o tomar provecho de eso.

Me gusta más ser una chica normal, y con amigos que de verdad se interesen por mi y no por el dinero de mis padres, por eso es que en el colegio casi nadie sabía que mis padres tenían dinero, tengo dos coches no son último modelo pero si son buenos autos, lo escogí por lo mismo porque no me gusta llamar la atención y menos ahora.

Uno casi no lo uso ya que es muy grande para mi gusto y el otro casi siempre lo llevaba a todo lado más al colegio.

-A que hora regresas del colegio cariño?- cuando escucho la voz de mi madre preguntando eso entonces vuelvo a la realidad.

-No lo sé madre, yo te aviso cuando vea el horario más tarde, ahora me tengo que ir, buen día- les digo para luego pararme de la mesa y coger las llaves de mi auto.

Mi otro auto si era más llamativo por eso siempre lo dejaba en casa, solo lo usaba cuando era necesario.

Me monto al auto y me miro al espejo no puedo evitar suspirar y agarrar el control inalámbrico abro el portón, cuando salgo de mi casa puedo ver a unos niños jugando en una plaza cerca, se ven tan felices que no puedo evitar tratar recordar cuando yo era feliz, cuando todo el tiempo sonreía o cuando decían que yo era la alegría de donde sea que iba, pero ahora sólo sonrió cuando estoy con mi familia o cuando recuerdo algo que de verdad me puso feliz antes, ahora sólo lo haga para que crean que todo está bien.

5 minutos más y estaba llegando ya al colegio, estaba todo el mundo en el portón en el estacionamiento, estaban por todas partes, y yo, bueno yo sólo suspiró y aparque el auto, me baje y iba caminando cuando suena el timbre, tengo que apurarme porque si no el profesor no me va a dejar entrar, me hacerco a mi casillero y estoy sacando mis libros cuando escucho un:

-Vaya, Vaya, pero mira quien está aquí- cuando escuche su voz sólo pude cerrar los ojos fuerte y tensar todo mi cuerpo y deseando que todo pase rápido.