Mi vida a tu lado

Nueva vida

Prov. Bon

Una nueva vida comenzaba.

Estamos de camino al lugar de nuestra luna de miel que, a petición de mi pequeño pelimorado, sería en una casa en el campo.
Ya que no era verano y no es que hiciera expresamente calor, me pareció bien su idea. Unos días después, aquí estamos.

Bon: ya hemos llegado.
Bonnie: venga, vamos a entrar!
Bon: espera, Bonnie!

Bonnie sale a toda velocidad del auto, incitándome a que saliera con él. Cogemos cada uno nuestra maleta y entramos en la casa.

Es una casa de piedra, de dos pisos. En el primer piso se encuentran el salón, la cocina, un pequeño comedor y un baño. En el segundo piso están nuestra habitación y otro baño, algo más grande que el del primer piso. La casa, además, tiene un jardín trasero y una pequeña terraza en éste, así que podremos relajarnos ahí. Solo vamos a estar por 4 días, pero el sitio es increíble.

Bonnie: es enorme!
Bon: si... Espera, a dónde vas?
Bonnie: a explorar dónde está el baño! Me hago pis!

Y sale corriendo. Río levemente y cojo ambas maletas para llevarlas a la habitación, que me sorprende bastante cuando entro.
Es un cuarto bastante amplio, con una cama matrimonial, una cómoda y un armario. Tanto los muebles como la pintura de la pared son de colores claros.

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Bon: qué quieres hacer?
Bonnie: hm... No lo se... Tal vez... explorar un poco el campo?
Bon: nos vendría bien andar un poco después de tanto tiempo sentados... De acuerdo, me parece bien!
Bonnie: genial! Voy a ponerme algo más largo y salimos.
Bon: vale, te espero abajo.

Bajo a la entrada a esperar a mi conejito. Baja unos segundos después, lleva unas mallas moradas que se ajustan perfectamente a sus piernas y una camiseta de manga corta verde, alrededor de la cintura lleva atada una sudadera. Como siempre, lleva sus tenis morados.

Bonnie: ya estoy. Vámonos!
Bon: si *sonríe*

Salimos a andar por el campo, aún no entiendo por qué siento mariposas, no, dinosaurios en el estómago cuando camino a su lado. Quiero tomarlo de la mano, pero no entiendo por qué no me atrevo.
Salgo de mis pensamientos cuando una rama me da en el rostro. Mientras yo siento mi cara dolorida, escucho a Bonnie aguantar la risa.

Bon: de qué te ríes?
Bonnie: esto me recuerda al campamento, te acuerdas?
Bon: ah... S-si... Hice un ridículo enorme...
Bonnie: por qué lo dices?
Bon: intenté confesarte mis sentimientos... Pero no pude...
Bonnie: y por eso apareció "Bonsua"? *aguantando la risa*
Bon: n-no te rías, e-estaba nervioso por dormir en la misma cabaña que tú...
Bonnie: *ríe* que tonto eras... Y lo sigues siendo... Pero eres mi tonto...

Lo miro y sonrío. Noto mis mejillas calientes, y estoy seguro de que no es por el golpe.
Seguimos caminando hasta llegar a un sitio rodeado de árboles y flores en el que se encuentra un gran lago. (N/A: a qué me recuerda esto?)

Bonnie: Bon! Mira, vamos a bañarnos!
Bon: eh, Bonnie, no creo que...
Bonnie: no seas tonto, venga!
Bon: aish, vaale...

Bonnie se quita la ropa hasta quedarse en bóxer y se mete corriendo en el agua. Yo hago lo mismo, solo que más lento. Cuando empieza a nadar me recuerda a una sirena (N/A: en serio, me recuerda a algo)
Empezamos a jugar en el agua, nos divertimos tanto que, cuando nos queremos dar cuenta, ya casi está anocheciendo.

Bon: conejito, va a anochecer, deberíamos volver ya.
Bonnie: vale, de todas formas quería ver el atardecer.

Ambos salimos del agua, nos secamos con nuestras sudaderas, nos vestimos y volvemos a la casa.
Una vez allí, subimos al techo para ver el atardecer. Bonnie se acurruca a mi lado y yo lo rodeo con mi brazo.

Bonnie: Bon...
Bon: si?
Bonnie: te amo...
Bon: yo también te amo...

Sin duda uno de los mejores días de mi vida.

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Holis! Qué tal? Me extrañaron? Seguro que no.
Espero que les haya gustado este primer capítulo de Mi vida a tu lado.
No se olviden de votar y nos vemos en la próxima. Chaito!