Gracias a él

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Siempre escuchaba los consejos del tío Barry y los del tío Hal, los comprendía rápidamente, no por nada era el niño mas veloz del mundo. Pero había algunos que no los comprendía del todo, y esos eran los que se trataban sobre el amor; aunque era de esperarse, después de todo, aún era un niño de 12 años sin ningún tupo de conocimiento o experiencia sobre aquello

  — Entonces... ¿Cómo lo sabré? — pregunte mirando a los dos. Estaba en la casa del tío Barry, el cual la compartía con el tío Hal; me quedaría máximo dos semanas con ellos, pues la tía Iris estaría fuera de la ciudad en ese determinado tiempo

Estábamos hablando sobre el tema del cual no entendía muy bien, exacto, del amor

— Pues eso lo sabrás tu mismo, Wally  — me dijo el tío B mientras le daba un pequeño mordisco a su porción de pizza

— Si, pero ¿Qué es el amor en si? — pregunte mientras le daba el ultimo mordisco a mi octava porción de pizza. Él me iba a responder pero en ese momento tocaron el timbre de la casa

— Yo voy — aviso mientras se levantaba de la silla, y luego salió corriendo con su súper velocidad, lejos del comedor

 Suspire frustradamente

— Te daré un consejo, Wally — dijo el tío Hal, al instante puse mi total atención en él — No te atormentes intentando saber que es el amor, pues es demasiado confuso de por sí. Solo ten paciencia, cuando encuentres a la persona indicada para ti, podrás comprender todo

— Gracias, tío Hal — le sonreí

— No hay de que, chico  — me devolvió la sonrisa

Escuchamos pasos que se dirigían hacia donde nos encontrábamos

  —  Hey Wally, adivina quien vino a visitarte — menciono el tío B al llegar al comedor haciendo que voltee a verlo

Detrás de él, apareció Robin; el compañero de Batman y mi mejor amigo

— Hola, KF — me saludo con una sonrisa alegre haciendo que se me acelerara el corazón y un calor invadiera mis pecosas mejillas

Esto solo me pasaba con Robin, desde que lo conocí, y no comprendía porque me pasaba esto cuando él estaba presente  

— Hola, Rob — le sonreí, me levante de la silla y me dirigí hacia él  — ¿Quieres ir a jugar videojuegos en mi habitación? — me quedaba muy seguido ahí, así que tenia mi propia habitación

— Claro — respondió el chico maravilla, sin perder tiempo lo agarre de la mano y lo guie hacia mi habitación, al niño de 10 años no le molesto en absoluto el hecho que íbamos de la mano

Y ahora que ya tengo 16 años, comprendo cosas que antes no

 Gracias a Dick Grayson, mejor conocido como Robin, pude comprender que era el amor en si

Todo gracias a él

One-shot's BirdflashDonde viven las historias. Descúbrelo ahora