42

96 11 1
                                    

Después de bailar con Inojin fui a tomar algo, era raro el ambiente entre nosotros.

Luego recordé algo y fui con mi madre.

—Mama—ella volteo—¿No invitaste a la señora Matsumoto?

—No me contestó, cariño....

Me extrañe, cuando volví del campamento la llamé y tampoco contesto. Ya llevaba días intentando y nada.

Mañana tendría que ir....

—Un momento, yo te conozco...—Dijo mi abuela Mikoto, mientras veía a Inojin

—¡Oh! El era el pequeño novio de Sarada, ¿No?—nos sonrojamos

—¡Es cierto! Que tonta fui, ni siquiera me había dado cuenta...—dijo mi mamá

—Es lindo recordar y volver a verlas...—dijo el

—¡Tan tierno!—dijeron mis abuelas.

—¡Oh dios! ¿Y tu madre, Ino-cerda? Ella era mi mejor amiga, y perdimos el contacto...

—Ahora mismo está en casa, señora Uchiha

—¡Tengo que verla pronto!—dijo emocionada.

Luego hablaron de cuando éramos niños y lo que hacíamos, y si, fue vergonzoso. Seguimos bailando un poco más, comimos y por último contamos anecdotas divertidas.

Cuando se hizo tarde, todos se fueron, al despedirme de Chōchō la note algo desanimada, de hecho ella fue la primera en irse, le marco a sus padres y solo se despidió de mi, también me dijo que les dijera a todos adiós de su parte.

Tendré que hablar con ella...

Luego, se fue Sadako, le siguió Shikadai y después Sumire.

Koji y Denki se fueron en taxi, Ryogi se fue con Kagura, pero antes de irse quiso hablar conmigo en privado.

Me pidió ayuda con Sumire, dijo que le gustaba de verdad y quería que ella lo notará. Estaba un poco desanimado en que ella no pareciera interesada en el. Le dije que contaba conmigo, aunque aun no sabía exactamente qué hacer.

Y por último Inojin...salí con el a esperar a sus padres.

—Te extrañe tanto—me abrazo—tanto, tanto....los días que estuviste sin despertar fueron un infierno...tu, tonta...siempre preocupándome...—me sujeto más fuerte y yo también lo hice.

—Lo siento...

—Crei que me dejarías solo...si a ti te pasa algo, me muero....por que nada tiene sentido sin ti, Sada....mi pequeña Sada...—era tan nostálgico que me dijera de esa manera.

—Jamas te dejare...Jin, y aunque te cansaras de mi....siempre estaré para ti—el se separo y me miró los ojos, luego los labios, yo hice lo mismo. Estábamos acercando nuestros rostros poco a poco hasta que escuchamos un claxon que nos sobresaltó.

Lo siguiente fue mi madre salir corriendo de la casa.

—¡INO-CERDA!—grito mamá con algunas lagrimas, papá la seguía más tranquilo mientras caminaba con una sonrisa.

—S-siento que mi mamá sea...—estaba por disculparme con Inojin, pero me distraje al ver como su madre salía del auto, azotaba la puerta y corría hacia mi mamá con algunas lágrimas también.

—¡FRENTONA!—grito su madre

—No te preocupes....estoy acostumbrado..—dijo Inojin con una gota en su cara.

—S-si...—podia percibir el aura negra de nosotros.

Nuestras madres se abrazaron y sollozaron felices de su encuentro. El padre de Inojin salió con una sonrisa, y con los ojos cerrados se acercó a su esposa, que estaba con mis padres.

—¿Que tal, Sasuke? Tanto tiempo...

—Perfectamente, Sai...me alegro de verte ¿Que tal estás tú?

Hablaban con normalidad... definitivamente soportaban bien a sus mujeres.

Just her....(InoSara)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora