Chica Rebelde

Capitulo 32 - El Ojo

Capitulo 32 - El Ojo

Dos días. Dos días los cuales puedo asegurar que han sido los mejores dos días de mi vida. Dos días en los que Harry se ha portado como el chico más bueno del mundo. Sonará estúpido viniendo de alguien como yo pero así es.

Los chicos habían aceptado bien nuestra ¿relación? y por bien me refiero a que sus burlas no fueron tan pesadas como yo las esperaba.

Zack estuvo sin hablarme solo unas horas después de que supo la noticia, según él estaba indignado porque le quité al amor de su vida en su propia cara, aunque luego me perdonó con la condición de que teníamos que compartir a Harry – sí, mi amigo es bastante raro-, Ashley dejó de llamarme por mi nombre para utilizar el término prima, lo cual ella sabía que eso me molestaba, los Miller, sobre todo Thomas, decían que ya sabían que nos amábamos en secreto pero no queríamos aceptarlo, Leo y Lucas resultaron ser quien aconsejaron a Harry invitarme a salir, según lo que dijo Lucas estuvo como una semana pensando en cómo hacerlo, Noelia parecía una loca diciendome continuamente no se que cosa del brillo en los ojos, a lo cual no le presté mucha atención y finalmente María estaba contenta por mi y también por ella porque ya no sería la única con novio. Aunque Harry y yo no éramos novios, a ver, lo estábamos intentando pero ni él ni yo nos había hecho la pregunta.

Hoy era jueves. Solo faltaba un día para salir de vacaciones y aunque solo eran dos semanas serían suficientes para descansar por completo del infierno que suponía ir a las clases.

Mi despertador sonó como todos los días a la misma hora y como todos los días lo apagué y dormí 5 minutos más o al menos eso creo. Harry vendría por mi y por Noelia, la cual nunca quería venir pero siempre la convencía.

-¡Melania! – Gritó Noelia desde abajo- ¡Harry ha llegado!

-Dile que se espere un momento - le grité mientras me terminaba de arreglar

-Ya se lo he dicho - gritó desde abajo -Y me ha dicho que te arregles rápido

-¡Ya voy me queda muy poco! - le grité

Ya casi estaba lista, me estaba pintando el ojo derecho, delineado arriba y pestañas glamurosas, aunque debo admitirlo soy un poco lenta pero me gusta que la línea me quede derecha.

-No lo hagas se enfadará – decía Noelia subiendo, pero no le presté mucha atención.

La puerta de mi habitación se abrió, haciendo que diera un saltito sobresaltada, Harry me miro y sonrío

-Genial Harry has hecho que me quede ciega - dije sarcásticamente señalando mi delineado.

-Melania faltan - miró su móvil - dos simples minutos para que toque el timbre - dijo serio – y llevo 10 minutos esperándote afuera.

-No pienso salir de mi casa con un ojo pintado y el otro no - dije volviendo mi vista al espejo.

-Lo harás – dijo acercándose a mi –vámonos – dijo estirando su mano.

-¡No! Ya te he dicho que no, espérate - dije sin mirarlo, pintando mis pestañas, de pronto sentí unas manos en mi cintura y luego me levantaron –bájame.

-¡No! –dijo mientras salíamos de la habitación – vamos a llegar tarde por tu culpa.

-¡Harry Williams bajame ya! – dije mientras bajamos las escaleras y Noelia nos seguía burlándose de mí – tú también me las pagaras Noelia

-Cállate me vas a dejar sordo - dijo Harry tapándome la boca con su mano

Salimos de la casa, yo en el hombro de Harry, Noelia cerró la casa, Harry me acomodó en el asiento del copiloto, arrancó y fuimos al instituto.

Llegamos a la escuela y todos me miraban raro, pues claro era la única chica que se le ocurría llevar solo un ojo pintado.

-¿Os estáis dando cuenta de cómo me están mirando todos? – les dije a Noelia y Harry – es vuestra culpa

-Tal vez impongas una moda nueva –dijo Harry burlón – o tal vez aprenderás a levantarte temprano.

-¡Dios Harry eres tan gracioso! – dije con notorio sarcasmo

-Vale no te enfades, estás bien – dijo Harry mirándome

-vale no te enfades – imité su voz –me voy a mi clase, nos vemos en el almuerzo – dije dándome la vuelta para irme cuando la mano de Harry agarró mi muñeca haciéndome girar hacia él

-Adiós guapa – dijo para luego capturar mis labios y unirlos en un beso.

-Creí que veníamos tarde – dije burlonamente separándome.

-¿Ah? – dijo Harry al ver que le corte el beso.

-Tómalo como la venganza de mi ojo - dicho esto di media vuelta y me fui a mi clase escuchando la risa de Harry.

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OS REGALO MI CORAZÓN, VUESTRO ES, MIO NO.