Por favor jefesito no me maltrate mas.... 《Concluida》

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PoV Flug

Me arrodillé y lentamente vi el enorme bulto que ya hacia en el apretado bóxer de mi amo tímidamente baje aquella tela delgada y sonrrojado lo vi su falo era enorme .

-te asustaste mi lindo gatito?

-es solo que bueno es m-muy grande

-no tengas miedo mi dulce inventor no te obligaré a nada solo dale una lamida si no te gusta el sabor sólo lo acarisiaras con tus manos

-e-está bien

Tímido lo tome con suavidad el estaba acostado me acomode y lo lami la verdad me gustó el sabor levemente y empecé  a lamerlo más gustoso lo absorbía como una paleta de hielo derritiéndose en un caluroso verano tranquilamente aún que bueno no sabía cómo continuar mi jefe soltaba sonoros gruñidos y jadeos tímidamente lo tome y metí la punta en mi boca chupandola y pasando mi lengua con ella sentía como si quisiera meterla más a fondo al sentir su mano tomándome del cabello tiernamente y empujarme un poco así que lo ise se sentía muy extraño estaba a punto de llegar a mi garganta y el me paro y me dijo con esa voz dulce que no solía usar ya hace mucho.

-seguro? No quiero que te lastimes ..

Desidido seguí hasta meterlo completo en mi boca entrando así en mi garganta era como si no se, era raro nunca antes había sentido algo así en mi garganta esto era demasiado nuevo para mi o bueno mínimo en referencia a mi boca empecé a moverme la verdad empezaba encantarme escuchar a mi jefe gruñir y empecé a sentir un sabor suave era tan vergonzoso lentamente empecé a repetir el vaivén asta que empecé a chupar y absorber como un biberón.

-Por dios Flug si sigues así vaz a matarme ah!~ del placer

Continuaba más rápido asta sentir como llenaba mis mejillas sin parar de un líquido espeso y blanco lo tragaba con mis ojitos cerados y sentía como caían algunas gotas me encantaba ese sabor era muy rico entre un dulce y picante sabor a lujuria compartida, me separe lentamente manchando mis mejillas aún con un poco de saliva y sus fluidos, note su sonrisa coqueta y me tomo velozmente apegandome y empezando a besarme lentamente era un delicioso baile de nuestras lenguas una unión que nunca había sentido con el o bueno desde que era niño, pero esta vez era tan especial sentí como empezaba a amasar mi trasero fuerte pero a la vez sus manos trataban de no lastimarme gemía suabe entre el beso me excitaba demasiado el, lentamente se acercó con su mano a ese lugar tan vergonzoso y empezó a introducir suave uno de sus dedos en mi pequeña entrada, entraba muy rápido sólo me sonrrojaba el recordar cómo aveces por las noches me tocaba pensando en el.

-a-awn j-jefesito~

-amor te agrada lo que ago?

-u-ujum~

-se nota que te as tocado aveces por aquí entró muy rápido mi bebe~

Me encogí de hombros y sentía como lo metía todo lo movía tan rápido y yo moría del placer gimiendo fuerte y sonoro lentamente sentí el segundo dedo era un poco duro y los metía y sacaba lento bastante lento empezó a besarme nuevamente y dar después un recorrido con la lengua por mi cuello era tan delicioso, comencé a sentir como acariciaba mis pequeños pesones y los acariciaba, con su lengua traso un laaargo camino asta mi pecho entre besos chupetones y varios hilos de su saliva caliente recorriendo mi cuerpo tan lento de un momento a otro sentí como empezó a absorber uno de mis pesonsitos era tan delicioso y suabe su tacto en mi cuerpo.

- mira estos botónsitos rosas son tan adorables ojala le den leche a nuestros hijos en algún momento~

Sentí como me ruborizó y empezó a ir mas rápido con sus dedos y alli metió el tercero fingiendo embestidas rápidas era tan fuerte tan excitante moría del placer que me proporcionaba nuevamente, sentía lo excitado que estaba ya muy cerca de mi entrada y me derretía en sus brazos como un hielo al sol lentamente empecé a mover mis caderas en busca de más placer se sentía demasiado bien ese movimiento tan lento y rápido alli bino el cuarto dedo más y más fuerte cerraba mis ojos fuerte se sentía increíble al punto de sacarme lebes lágrimas del placer todo no me podía creer que estaba tan excitado y gemía tan fuerte el siguió dándome ese trato tan especial podía ir rápido pero era tan tiernamente cuidadoso me acurrucava contra el, más apegado sentí como los saco, sin querer o prevenirlo me bine de golpe manchando nuestros abdomenes