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Ni el glamour impedirá ver el color de tus ojos.

Un chico de cabellera verde se encontraba en un bar con sus amigos pasando el rato, pasándolo bien luego de tanto trabajo

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Un chico de cabellera verde se encontraba en un bar con sus amigos pasando el rato, pasándolo bien luego de tanto trabajo.

—Te digo viejo, es en serio. Me dijo que no quería nada con un idiota como yo—Kaminari Denki dejó caer su cabeza en la mesa—No soy taan feo

—Que mal por ti. Ya llegara alguien Kaminari—dijo el pecoso dando palmaditas en la cabeza del rubio.

Bakugo chasqueó la lengua. No sabía porque estaba escuchando estas estupideces. Decidió ignorar a ambos idiotas, prestando atención a otra cosa, miró por la ventana que daba a un sucio y callejón oscuro. Al enfocar mejor su vista, notó a un chico que se le hizo conocido.

—Maldición, el bastardo de las mitades— murmuró pero su amigo inútil le había escuchado y fue demasiado tarde pues este se retiró de la mesa y fue a buscar al chico que estuvo investigando por días.

—Maldición, el bastardo de las mitades— murmuró pero su amigo inútil le había escuchado y fue demasiado tarde pues este se retiró de la mesa y fue a buscar al chico que estuvo investigando por días

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Se sentía como una presa a punto de ser cazada.

Escuchó gruñidos pero al estar en el callejón no identifica de donde provienen los sonidos. Trató de normalizar su respiración y observó el lugar que no era para nada limpio, el olor era nauseabundo, la pared tenía pintas y el suelo estaba pegajoso.

Quería gritar por ayuda pero si nadie notó que lo seguían desde el parque no existía probabilidad alguna de que acudieran a su llamado.

Estaba solo.

Divisó una puerta de servicio frente al contenedor pero corría el peligro de no estar abierta y eso sería peor. Al menos el olor de la basura cubría el suyo.

Cada vez escuchaba los gruñidos y ahora pisadas y arrastre más cerca. En cuestión de segundos tuvo a la criatura que solía ser la pequeña con sus dientes afilados y tentáculos serpenteando tras su espalda. Se posó encima de la tapa del contenedor de basura siseando cosas que no podía entender. Shoto retrocedió asustado. No tenía salida alguna incluso si ponía en práctica lo aprendido. No servía con... monstruos. Cerró los ojos esperando el ataque.

La Sangre del Nefilim [Tododeku]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora