DARK MEMORIES ·· Seungcheol / S.coups

PARIS PT. 2

Cuando estaba por contestarle Jeonghan quitó toda la atención que tenía sobre mí y subió la vista hasta llegar a un punto fijo, seguí su mirada para poder visualizar lo que había robado su atención, eran dos chicas que venían escaleras abajo, ahora entendía lo que pasaba, las dos chicas eran hermosas, ambas desprendían un aire de elegancia y juventud al mismo tiempo, estaban tomadas de los brazos y sonreían entre sí, me congelé por un momento, una de ellas era la chica con la que había tenido un encuentro en el jardín hace unos momentos, ahora lucía diferente, tan llena de vida que irradiaba felicidad a cualquiera que la viera, miré a mi alrededor y al igual que mi amigo, todos apreciaban a las jóvenes, ellas se habían robado la noche en tan sólo un instante. Cuando bajaron por completo las escaleras se unieron a un grupito y comenzaron a hablar con ellos, toda la gente en el salón empezó a hablar de ellas, no entendía lo que decían y no era para menos, no podía apartar la vista de aquella chica, la misma que me había visto quebrarme en el patio trasero, ahora parecía otra persona diferente, a la luz de la luna no había podido apreciarla correctamente, era alguien agradable a la vista, su sonrisa iluminaba la sala y con sólo mirarla te podías dar cuenta que era alguien inteligente con quien podrías hablar durante horas, llevaba un vestido blanco lleno de pequeños brillos que destellaban aquí y allá, con los hombros descubiertos mis piernas me fallaron por un momento, quería acercarme a ella, lo deseaba. Cruzamos miradas y ella la retuvo por un instante y después me sonrió, me alarmé un poco, ¿me estaba sonriendo a mí?, poco después se abrieron paso hacia nosotros, Jeonghan me dio un codazo para que viera lo que sucedía, pero yo ya estaba muy alerta.

-Señor Jeonghan, me alegró que haya podido acompañarnos en esta velada- se dirigió a mi amigo lo que yo llamaría el guardián de las chicas, no se separaba mucho de ellas, un tipo con pinta de pocos amigos de unos sesenta llenos de arrugas y canas.

-No me lo perdería por nada-

Mientras se dirigía a los demás Jeonghan me susurró al oído que esta persona era la mano derecha del CEO de la compañía donde trabajaba, no me sorprendió, la actitud que tenía y la forma en la que se comportaban los demás me hacían entender que era alguien con un cargo importante, cuando aparte la vista de este hombre me encontré a ella mirándome, desvió la vista de inmediato, e hice lo mismo cuando él se volvió a dirigirse hacia nosotros.

-Señor Jeonghan déjeme presentarles a las señoritas Sooyoung y Eunhye- ellas hicieron una pequeña reverencia y se presentaron ellas de nuevo.

-El placer es mío, con mujeres tan bellas presentes me siento honrado- ambas chicas sonrieron, habían recibido bien el cumplido de Jeonghan, él era experto en eso, tenía grandes habilidades pero el secreto de su éxito a tan corta edad se debía a que sabía cómo ganarse a la gente, tenía a su cargo a todo un equipo a la corta edad de 27 años, todo un logro para cualquier persona que lo juzgara.- Él es mi amigo Seungcheol, es arquitecto y hoy lo he obligado a venir conmigo-

Las chicas rieron por lo bajo y se inclinaron de nuevo, sentía como la sangre subía a mi cabeza hasta que una de ellas me extendió la mano.

-Ya lo he adivinado antes- dijo Eunhye con una sonrisa pícara; ese comentario levantó la atención del grupo e hizo que la sangre subiera más rápido.

-Será mejor que sigamos el recorrido, aún hay mucha gente a la cual saludar- dijo su guardián jalando a la chicas sin dejarlas despedirse.

-Creo que es muy obvio que estás aquí contra tu voluntad- dijo por lo bajo mi amigo.

-Supongo que sí- le contesté evitando soltar algún detalle del encuentro que tuve con ella, quería guardarlo para mí.

La velada continuaba, no podía decir que me sentía mejor o más cómodo, no era así, pero lo estaba soportando prodigiosamente, a decir verdad, la única razón por la que estaba aguantando este infierno era por las mirada furtivas que teníamos el uno con el otro, no podía describir lo que estaba pasando pero intercambiábamos miradas cada cierto tiempo, cada una tenía un sentimiento distinto, no podía descifrar que significaban todas éstas o porque seguían ocurriendo, me era inevitable dejar de mirarla, tal vez fuera el hecho de que además de Jeonghan ella era la única que sabía lo que me ocurría realmente, tal vez era por la energía que desprendía aun sabiendo que probablemente tenía las misma ganas de estar aquí que yo, lo cual me parecía lo más intrigante, era obvio que no se sentía cómoda en el lugar, lo pude ver por un instante allá fuera, en su mirada, pero aquí dentro todo era diferente, no había rastro de incomodidad en ninguna parte de ella.