patinaje sobre hielo

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Se apresuraba en terminar de acomodar y firmar los papeles que estaban en su escritorio, sus manos se movían rápido entre firmar por todos lados y acomodar en orden cada documento.

No le tomo mucho tiempo acabar con su deber, así que dejando la pluma a un lado se tallo los ojos que estaban un poco cansados de leer y se puso de pie agarrando su gabardina que estaba en el respaldo de su silla de cuero y se dirigió a la salida de su oficina.

Llevaba unos cuantos pasos hacia la salida de la mansión cuando su móvil comenzó a sonar anunciando una llamada.

Con rapidez lo contesto.

— "Shisou" — la monótona voz de su alumno le contesto rápidamente del otro lado.

— "Ah, Fran ¿que pasa?" — le pareció escuchar otra voz de fondo y una sonrisa que se le parecía conocida y al mismo tiempo odiada.

— "Shisou, lamento no ser Haru-san, pero tal vez la próxima vez me esfuerze para que no este decepcionado" — soltó un chasquido de lengua, y esa molesta risa que ahora pudo identificar con mas claridad se dejo escuchar.

— "Su pedido esta esperando por usted shisou" — sonrió como si tuviera a Fran frente de el, burlón.

— "Ya veo, me estoy dirigiendo ahora mismo hacia allá, que te la pases bien con la princesa, y usen condón" — y sin darle tiempo colgó, no sin escuchar un pequeño grito de su alumno y las grandes risas del mocoso de varia.

Las calles estaban como siempre abundado de personas, sus pasos se dirigieron hacia una tienda de joyas que se encontraba a unos cuantos kilómetros de la mansión vongola.

La tienda de joyas "Bella Duchessa" se alzaba frente a sus ojos.

Con pasos rápidos, se adentro y camino directo hacia la dama que atendía el lugar.

— "Buon pomeriggio, ¿posso aiutarti? — {"buenas tardes, ¿en que puedo ayudarle?"} del bolsillo de la gabardina extrajo un pequeño papel que le entrego a la trabajadora.

— "Vengo per un ordine per conto di Mukuro Rokudo" — {"vengo por un pedido a nombre de mukuro rokudo"} la chica reviso el papel asintiendo con la cabeza.

— "concedimi" — {"permitame"} desapareció dentro de un pequeño pasillo y rápidamente regreso con una caja pequeña de terciopelo rojo carmesi en sus manos.

— "ecco qui, signore" — {"aquí tiene caballero"} lo tomo y guardo en uno de sus bolsillos dentro de la gabardina dicho objeto.

— "grazie mille" — {"muchas gracias"} le entrego su tarjeta de crédito para pagar y después se encamino a la salida.

— "grazie per l'acquisto — {"gracias por la compra"}.

De camino a la mansión repaso cada uno de los pasos a seguir de allí en adelante, si lo pensaba bien, todo hasta ahora a salido perfectamente, nada de que preocuparse, lo difícil venia después.

La mansión estaba completamente silenciosa, al parecer todos tenían algo que hacer.

— "Mukuro-kun!" — la voz junto con los apresurados pasos hicieron que se girara para mirar a su linda primavera que corría hacia el.

La recibió en un abrazo y rápidamente la beso, la había extrañado demasiado.

— "Cuando volviste" —ella lo miro con una bella sonrisa, casi tocándole los labios.

— "Hace unos minutos, quería darte una sorpresa, pero no te encontré" — termino haciendo un adorable puchero.

El sonrió con esas sonrisas que eran solo para ella, dirigió su rostro hacia el cuello descubierto de ella acariciándolo con la nariz e inhalando su dulce aroma.

30 days: OPT ( 6986 )Donde viven las historias. Descúbrelo ahora