Un sueño sin fin.

Miedo

12 meses con 2 semanas.

Ya  un año desde que comenzó tu sueño mi nena...
Hoy era el día en el que las vacaciones que habíamos tenido Erizel y yo decidimos tomar habían llegado a su fin; por alguna razón me sentía enfermo, con tristeza, hace mucho que no me sentía tan feliz, una parte de mi corazón se sentía igual de mal como cuando me enteré que Taylor se había accidentado, sentía...¿miedo?, ¿tristeza? ¿o angustia?, por alguna razón presentía que algo malo pasaría, no podía controlar la respiración de mi pecho, me sentía muy mal.

Me desperté de golpe, y vi a Erizel sentado en mi cama mirándome.-¿qué pasa?-dijo mientras me miraba preocupado-me senté aquí porque en la madrugada empezaste a sudar y respirar con dificultad, y sin olvidar las lágrimas...-susurró para luego con su pulgar limpiar las lágrimas en mis mejillas.

Me di cuenta de que me encontraba llorando...no lo había notado antes, en este momento me sentía igual de mal a esa noche...siento como que si eso volviese a suceder en cualquier momento, solo pensaba en Taylor,Taylor y TAYLOR....

- no...no se-tartamudee no podía controlar mi voz sentía un nudo en la garganta.-me siento raro...

Erizel me miró raro durante un minuto para luego poner su mano en mi frente-¡estás ardiendo!-dijo sorprendido para luego pararse y decirme-¡llamaré a un doctor!

No dije nada, no podía, sonaba estupido pero sentía algo que me lo impedía, cada vez la inseguridad y la desesperación se apoderó en todo mi cuerpo,me levanté con rapidez y me dirigí al baño para vomitar; en estos casos Taylor siempre me ayudaba.

Se abrió la puerta y llegó Erizel acompañado por otro señor, el doctor rápidamente se acercó a mi y dijo-tiene fiebre, hay que acostarlo-para luego empezar a sacar varias cosas de su bolsillo; yo solo seguía vomitando, Erizel me dio un bote para poder vomitar , me llevaron a la cama. Unos minutos después de que me diesen unas pastillas me quedé dormido y no sé qué fue lo que sucedió.

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Desperté y miré a mi alrededor, seguía en el hotel, pero se veía muy oscuro a mi alrededor; me quería levantar pero algo me lo impidió, era Erizel el cual me abrazaba fuertemente, lo moví lentamente del hombro y le dije-hola amigo...-dije en casi un susurro.

-¿¡estás bien?!-gritó levantándose como un resorte-me pusiste muy preocupado...

-tranquilo...ya me siento mejor-dije en una sonrisa fingida, en realidad mi cabeza dolía mucho y todavía me sentía muy raro, miré a la izquierda y a la derecha y le dije:¡¿Que hora es?!.

-son las 9:00pm te dormiste mucho, te revisaré la fiebre-se paró y se dirigió a un cajón y sacó un termómetro-levanta tu brazo , ocupo ponerte esto.

Levanté mi brazo y Erizel metió el termómetro en mi axila, mientras esperamos me  acordé que hoy era el día de entrega de la habitación-¡hoy era el día de entrega de la habitación!

-hablé con el señor de la situación y le dije que mañana partiríamos temprano y que luego ustedes dos se pondrán de acuerdo para que le pagues el día extra, también te dará un descuento.

-ok,mañana voy hablar con él sobre el dinero.-dije para luego quitarme el termómetro y ver mi temperatura-creo que ya me encuentro mejor...

Erizel agarró el termómetro alzó su ceja y me dijo-todavía sigues teniendo fiebre-agarró mi frente con su mano-iré por té y un sándwich para que cenes.

Este día había sido muy raro, solo espero que mañana me encuentre mejor para poder manejar...