El accidente.

77 22 0
                                    

Lunes 3 de Marzo.

Me encontraba en mi departamento en Estados Unidos. Cocinaba, pues al parecer quien se encargaba de las responsabilidades de la casa era yo, Mark, trabajo de cocinero en una cafetería muy famosa por su rico y sabrosos postres, actúale mente no tengo ningún familiar con el cual contar, mi única familia es Taylor y su mamá.

Pude escuchar a mi novia la cual gritó jugueteando para luego dirigirse a mí y abrazarme, o más bien treparse en mi, pues medía nada más y nada menos que 1.57m, mientras tanto yo media 1.80m.

—Iré de compras para hacer unos cuantos pendientes—me dió besos por toda mi cara y después un profundo beso en mis labios.

—¡O-ok!— tartamudeé nervioso y sonrojado por su acción, diario me sorprendía mucho, como si fuese la primera vez que la conociera — Yo iré a la cafetería, hoy llegaré noche a casa, ¿ok?

—Ok, solecito— dijo susurrando para luego dirigirse brincando de alegría a la puerta. —¡Adiós!— gritó y fingió lanzar un beso con su mano mientras yo fingí recibirlo.

Nunca logré averiguar de donde salía tanta energía de esa pequeña pulga.

Y cerró la puerta, dejando la casa completamente silenciosa sin su presencia, me hacía sentirme solo...

De repente se abrió la puerta con una Taylor agitada: —¡No hables con ninguna mujer!, !tú eres mío!—gritó sonrojada para luego sonreír mostrando sus hoyuelos y guiñarme el ojo coqueta.

no pude evitar reírme por su acción tan repentina y sorprendente- ¿solamente te regresaste para eso?-bromee alzando una ceja esperando una respuesta de ella.

-mmm...-actuó como que si pensase y luego sorprenderse- también a decirte que ¡te amo!.

No pude evitar sonreír como bobo,ella es la reina de las cursilerías, no sé qué haría sin ella, entonces, mi amigo Ryan me sacudía el hombro para que saliera de mis pensamientos arruinándolos por completos.

-¡Mark!, ¡Mark!-gritó moviéndome los hombros para que reaccionase.

-¡ah!, perdón..- susurre sonrojado- pensaba en Taylor.

-mmmm-dijo alargando la voz con su cara seria- ¡Tí-pi-co!.

Desde ese momento regresé a hacer mi trabajo, hoy era un hermoso día, nevaba, era mi época favorita del año y también la de Taylor.
Pero pronto sería algo inmemorable....

¡Nuestro aniversario!

Yo me encontraba trabajando en la cafetería, tarareaba silbando, como siempre pensando en Taylor...

Al terminar mi agotador turno le marqué a su celular pero no contestó, me preocupé; llamé otra vez y tampoco.

Mi preocupación aumentó, así que se me ocurrió llamarle a su hermano. Se burló de mí por preocuparme tanto, y me dijo que simplemente se encontraba en clases.
Así simplemente no le di importancia.

Ya era de noche, duro mucho tiempo o eso sentí yo, ya que me moría de preocupación por Taylor, me encontraba limpiando en la cafetería junto a mi amigo Ryan, pues la cafetería ya se encontraba cerrada.

Él prendió el televisor y prestamos atención a las noticias, decían que había mucha niebla y nieve, a demás anunciaron un accidente automovilístico.

No le presté atención y seguí haciendo mi trabajo mientras pensaba en un regalo para Taylor por nuestro aniversario. Las demás personas no importaban, sólo ella y yo.

~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~

Al terminar me subí al auto, cansado a decir verdad, pero el miedo y la adrenalina se apoderaban de mí causando que no me pudiese sentir relajado, prendí la radio, el silencio no era mi amigo,se escuchaba la canción favorita de Taylor.

¿Que irónico,no?
La vida siempre me hacia recordarte, quiera o no.

En ese momento entró una llamada de la madre de Taylor, causando sorprenderme debido a sus gritos y sollozos.
Lo que no sabía era que esa llamada iba a cambiar
mi vida por
completo.

Un sueño sin fin.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora