Fazbear's Academy | FNAF AU |

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Capítulo Uno
"De vuelta a la rutina"

-Casa Fazbear; primer día de clases. 5:30 A.M.

Un joven moreno de ojos azules caminaba por su hogar con sumo cuidado, era más de media noche y todas las luces de la casa se encontraban apagadas. Lo único que alumbraba el camino del chico era una pequeña linterna que este traía en sus manos, guiándose a través de los oscuros pasillos.

A pesar de la poca iluminación que le proporcionaba la linterna, pudo distinguir una figura moverse en la oscuridad. Aquello hizo que se su cuerpo tensase y un escalofrío recorriese su espalda.

Apresuró su paso tratando de llegar lo más pronto posible a su habitación, sin embargo, el sonido de una fuerte respiración le hizo poner la piel de gallina. Segundos después un monstruo con una apariencia similar a la de un oso robótico se abalanzó sobre él.

El chico se removió de manera violenta entre las sábanas de su cama, tratando de alejar aquel monstruo. La desesperación se hacía notar por su respiración agitada y el miedo reflejado en su rostro.

Debido a un movimiento brusco, terminó cayendo de la cama. Al sentir el fuerte impacto de su cuerpo al chocar contra la alfombra abrió sus ojos azulados de golpe, su respiración aún seguía acelerada, al igual que los latidos de su corazón, y por sus mejillas rodaban algunas lágrimas.

El chico miró a su alrededor, notando que se encontraba en su habitación, todo estaba bien, o al menos eso quería creer. Su despertador comenzó a sonar repentinamente, con aquella alarma tan conocida que le avisaba que era hora de despertar, aunque esta solo lograba causarle un punzante dolor de cabeza.

—Solo ha sido otra pesadilla, Freddy... Solo eso...

Hacia ya semanas desde que horribles pesadillas le despertaban asustado a intervalos irregulares de la madrugada.

Tomó su teléfono para apagar la molesta alarma y miró la hora que marcaba en la pantalla, rápidamente se incorporó limpiando su pijama azul de osos pardos y decidió darse una buena ducha de agua fría para relajarse y quitar de su cabeza todo residuo que aún quedase sobre la pesadilla que acababa de tener. También porque realmente necesitaba un buen baño.

(...)

En unos veinte minutos más o menos, el moreno ya estaba listo para asistir a la academia. Miró a su reflejo en el espejo del armario, dándose a si mismo una sonrisa de aprobación mientras arreglaba su chaqueta antes de salir de la habitación, rumbo al comedor. Ya ahí, se encontró a su padre, quien estaba sentado comiendo de su desayuno mientras leía con tranquilidad el periódico. Frente a él se encontraban dos platos con panqueques con miel y dos tazas de café aparentemente recién hecho.

—Buenos días, papá —Saludó tomando asiento frente a este.

—Buenos días, hijo ¿Cómo has dormido?

—Supongamos que bien —Respondió simplemente mientras se disponía a darle un bocado a sus panqueques.

Freddy separó su mirada de los panqueques para mirar al asiento vacío a su costado, en ese momento notó la ausencia algo, o más bien, alguien.

—Papá ¿Dónde está Golden?

—Posiblemente esté durmiendo aún, ya sabes como es —Respondió su padre encogiéndose de hombros con simpleza, con su mirada centrada en las noticias del periódico que leía.