Amor por contrato (EXTRAS)

Lo que jamás se supo:

•Christian•

Faltaba apenas unas horas para la boda de Justin y Taylor, la verdad es que estaba muy contento por él ¿Y cómo no estarlo? Después de todo es mi mejor amigo, me hace feliz que él lo este y que al fin este con alguien que realmente quiere, después de todo sabíamos que las cosas con Selena no saldrían bien.

Sin embargo... No me hacía del todo feliz, la noticia de la boda... No me hacía del todo conforme, no sé porque pasan cosas que deseas evitar pero... Sin quererlo... Taylor comenzó a atraerme hasta tal punto de gustarme, por supuesto que no quería hacer nada, no quería arruinar tan linda relación y mucho menos la de mi mejor amigo. Yo no quería que esto pasará, pero el corazón era traicionero, ella me gusta, no sé bien cuando sucedió, pero sé que tiene tantas cosas en común conmigo y tantas lindas cualidades que no pude evitar fijarme en ella. Quizás muchos me odien por esto, pero es difícil controlar tus sentimientos, en realidad no son controlables, estos muchas veces te juegan en contra... Y eso es algo que realmente me molesta. Pero como dije antes, no pensaba hacer nada para separar aquella linda relación, solo me quedaría con mis sentimientos en oculto y haría el intento de olvidar está atracción que siento por ella.

Me miré en el espejo, realmente me veía bien en traje, a diferencia de Justin no sentía que el matrimonio fuera algo tan rápido, siento que es algo que uno debe pensar bien antes de hacerlo, probablemente Justin la ama demasiado como para querer casarse, pero siento que hay que pensarlo bien antes de hacerlo. Aunque también está la posibilidad de que él necesitará hacerlo, casarse, después de todo el me contó una vez que para heredar una empresa de su padre este debía casarse, pero realmente no lo veo posible, Justin no es tan desesperado para hacer eso.

Sentí mi teléfono sonar y justo era en quién pensaba, contesté enseguida.

—Bro, ¿Qué pasa? —le pregunté, de seguro estaba muriendo de nervios. Después de todo en un día tan especial como hoy, él no llegaría y me llamaría a menos que fuese demasiado importante.

—¿Estás listo? Necesito que vengas, nunca viví está situación. Pero debo ser honesto, estoy muy nervioso, muriendo de los nervios —me dice él, reí. Este me pidió que no me burlara, que algún día viviría esa situación y sabré que no es tan chistoso.

—Esta bien, iré a verte. ¿Taylor también está allí? —pregunte. Quería verla en su vestido, ya sabía que se vería bonita pero enserio quería verla.

—No, ella está en casa. Yo estoy en uno de los hoteles de papá, ven enseguida, necesito tu ayuda —dijo este. Volví a reír y le dije que le llevaría un calmante, este acepto y después corte la llamada. Tome una botella de licor y salí de mi casa a la dirección que Justin me habia indicado, a los pocos minutos llegué, este me dejo entrar y me sonrió en cuanto me vio.

—Gracias por venir, ¿Que trajiste? —le mostré el licor, este me miró inseguro— Vamos, te relajara, pero no exageres, no es para emborracharte.

Este asiente, abre la botella y bebe. Yo sonrió, de verdad que está muriendo en nervios.

—Tranquilizate, ¿Cuál es tu miedo? ¿Que te diga que no? —le pregunté, este me miró y su mirada mostraba aceptación ante lo que dije. Yo fruncí el ceño— ¿Qué? Justin, ella dirá que sí.  ¡Por Dios! Por algo te acepto el matrimonio.

Este parecía que quería decirme algo, pero las palabras parecían no salir de sus labios. Luego este asintió y se sentó en la cama.

—Tienes razón, ella dirá que sí.

No sabía realmente que más decirle, quería tranquilizarlo y apoyarlo, pero ante estas situaciones realmente no sabía que decir. Me senté a su lado y le quite la botella de sus manos para beber también, después de todo también tenía mis razones para beber. 

—Le quiero —me dijo este, yo le miré. Este sonrió— me hubiera gustado haber hecho las cosas de mejor manera.

—¿Qué quieres decir? —le digo, realmente había algo que Justin no me estaba diciendo. ¿Acaso habían tenido algún problema? ¿Por eso temía que ella le rechazara?.

—Nada, no te preocupes.

Yo asiento, aunque por supuesto que no estaba conforme con aquella respuesta, este miró la hora en su celular y después comenzó a maldecir.

—¡Es tarde! Vamos, no quiero que ella llegue y yo no esté.

Nos levantamos enseguida, tomó sus cosas y después nos fuimos en dirección a la iglesia. ¿Que pasaría si ella no viera a Justin en la iglesia? De seguro que la lastimaría mucho, no quisiera verla triste. Comencé a ir con más velocidad para llegar a tiempo, y gracias a eso llegamos justo a tiempo. Este me dio las gracias y se adentro a la iglesia, yo por mi parte espere unos minutos y después me adentre a la iglesia para ir a sentarme, los chicos me vieron y me indicaron que me sentara con ellos.

—Al fin llegó el día, estaba esperando este momento —dice Ryan. Yo reí. Realmente ellos se pasaban hablando de este momento, de que es lo que creían que sucedería, de que Justin estaría muy nervioso. De qué quizás Taylor se daría cuenta de que Justin era un idiota y no vendría (por supuesto que eso solo fue una broma) y muchas cosas más, la verdad era que ellos esperaban más este momento que el propio Justin. Aunque como dije, solo eran ellos quienes esperaban con ansias este gran momento. En eso la música comenzó a sonar, indicando que Taylor había llegado, enseguida miré hacia atrás y la vi, ella venía entrando, abrí los labios en sorpresa. Se veía realmente hermosa, estaba radiante. No podía notar bien lo que su rostro reflejaba, sin embargo de lo que si me pude dar cuenta es de que ella estaba realmente hermosa.

—Puedo ver todo lo que tú mente dice —me dice Chaz en el oído, yo le miró, este me sonríe. Él era el único que sabía lo que sentía por Taylor y no porque se lo haya contado, más bien porque Chaz es demasiado observador y se da cuenta de todo. Que bueno que Justin no era así.

—Cállate —le dije. Este río y después me giré, no quería seguir viéndola, no me hacía bien. Además, Justin estaba justo al frente, no quería que notara que la observaba demasiado, no quería que él notara mis sentimientos hacia su futura esposa. Miré a Justin y este en realidad no tenía ojos para nada ni nadie más que para Taylor, la miraba atentamente y con una mini sonrisa en los labios, que solo era divisible por nosotros, sus mejores amigos que conocíamos sus facciones y expresiones perfectamente.

—Aww, mirenlo pero si está súper feliz —dice Ryan burlándose. Estos otros se ríen y yo les hago callarse, eran los únicos haciendo desorden. Que bueno que la música evitaba que la risa de ellos se notará, a excepción de los que se sentaban cerca nuestra.

—Obvio que está feliz, tontos —les dije. Estos rieron bajito. Yo rodee los ojos y solo me quedé mirando a la pareja, estos ya estaban uno al lado del otro. En eso el cura comenzó a hablar.

—Te admiró —me dice Chaz, yo le miró— el que seas capaz de soportar esto... Que la chica que te gusta se este casando con alguien más.

— ¡Shh Chaz! —exclamo, miré a los chicos pero estos estaban demasiados concentrados hablando entre ellos— no digas cosas así. Además... Yo soy quien no debí fijarme en ella.

—Sí, tienes razón. Pero aún así debe ser doloroso, y por eso te digo que admiró tu fortaleza —me dice él, yo le miró y este luego solo mira al frente, yo hago lo mismo después.

Él tiene razón, esto dolía. Pero no es como que pudiera hacer algo más.

En cuanto ellos dijeron sus “Aceptos” mutuos fue cuando pensé, ese acepto es uno para mí, la diferencia es que el mío es un acepto olvidar estos sentimientos hacia ella.

Estos sentimientos jamás deben ser contados, ni nadie más que Chaz tiene que saberlos.