Décima Parte

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─No puede ser, aun no se ha cumplido el tiempo...no puede suceder ahora

Todo parecía ir mal y Zeldris comenzó a desesperarse al ver que Tear no respondía, ni siquiera abrió sus ojos. Elizabeth uso sus poderes, pero nada funcionaba, asi que su única opción ahora mismo es derrotar a Mael para poder salvar a Tear. Rápidamente Zeldris se unió a Meliodas, juntos nadie puede detenerlos y mucho menos si es para salvar a la persona que aman

Mientras ellos luchaban, Tear se levanto y comenzó a atacar a todos, para luego huir de la escena, su rostro demostraba lo asustada que estaba y la poca magia que aún le quedaba, pronto acabaría asi que debía descender, pero no lo logro a tiempo, cayó sin poder frenar ni siquiera un poco, pero por suerte no murió

─ ¿Qué está pasando?...todos ellos...son monstruos ─pensó Tear —Tengo que esconderme

Desde entonces pasaron muchas cosas, algunas buenas y otras no tanto, pero no hay nada como ganar una guerra sin perder algo a cambio...entre todas esas cosas Meliodas logro derrotar a Mael con la ayuda de Sariel y Tarmiel, pero debido a que este fue superado por la materia oscura, murió pidiendo disculpas...La maldición de Elizabeth y Meliodas fue desecha, pero no por Meliodas, ya que un evento inesperado ocurrió durante la batalla, el no se convirtió en el Rey Demonio y Zeldris hasta ahora no ha podido encontrar a Tear por más que ha buscado

— ¿Aun nada? —pregunto Elizabeth a Meliodas —Ya han pasado dos meses

—Si...el de verdad está intentando aparentar que está bien, pero...sé muy bien que está sufriendo

—Meliodas, ¿Que fue de Gelda?

—Ella...le conté a Zeldris lo que ella me dijo hace años, cuando tuve que matarla

—... Entonces

—No. Yo no lo hice, la dejé vivir y ella se encontró con Zeldris, pero no sé qué fue lo que sucedió entre ellos

—Ya veo —Elizabeth colocó su mano en el hombro de Meliodas y le sonrió —Creo que Zeldris necesita a su hermano mayor ahora mismo

—... ¿Eso crees?

—Tu lograste volver a como estas antes, así que estoy segura de que sabrás que decirle en este momento

Antes de que Meliodas fuera a hablar con Zeldris, abrazo y beso a Elizabeth. Zeldris estaba observando cómo las nubes cambiaban de forma, pero realmente no prestaba atención

—Hey, Zeldris

—Meliodas, ¿qué sucede?

—Eso mismo quiero preguntar

— ¿Ah? ¿De qué hablas?

—Zeldris... puede que aún no me hayas perdonado y que no confíes en mí, pero quiero preguntarte esto solo para estar seguro

—... ¿Qué cosa?

— ¿Porque estas buscando tan desesperadamente a Tear? ¿Por qué quieres cumplir tu promesa? ¿Por qué quieres ayudarla como aliado? O... ¿Porque la amas?

— ¿A qué viene todo esto?

—Porque como tú hermano mayor, estoy preocupado, ya que también tienes a Gelda ¿verdad? Si vas a buscar a Tear, herirás sus sentimientos

—Si estas preocupado por eso, entonces deja hacerlo —Zeldris se levantó y le dio la espalda a Meliodas —Eso no sucederá

—Tu —Meliodas sonrió y se abalanzó sobre Zeldris revolviendo su cabello —Si que has crecido en este tiempo

Por otro lado, Elizabeth se encontró con King y Diane, quienes parecían tener prisa, pero se distrajeron con la escena de Meliodas y Zeldris

—Nunca pensé que después de todos los problemas, las cuatro razas otra vez estarían en paz —dijo King

—Sí y el Capitán parece ser muy feliz con Elizabeth y Zeldris junto a él

—Sí. Esta paz es algo que tenemos que proteger

— ¡Ah! Es cierto —dijo King —Nosotros tenemos que hablar con Zeldris, Diane

—Lo había olvidado

— ¿Eh? ¿Sucede algo? —preguntó Elizabeth

King y Diane le explicaron todo, tomándola por sorpresa. Los tres de inmediato llamaron a Zeldris para darle las noticias, cuando los escucho sus ojos de expandieron y voló lo más rápido que pudo en dirección al bosque de las Hadas, donde Ban y Jericho lo esperaban

— ¿Donde? —pregunto Zeldris

—Tranquilízate, ella ahora mismo está siendo tratada por Gerheade —respondió Jericho

— ¿Que le sucedió?

—No lo sé —dijo Ban —La encontré en un subterráneo, ella estaba muy herida y parecía estar sufriendo de dolor de cabeza

—... ¿Porque estaba en un subterráneo?

—No sabemos nada —repitió Ban —Pero el Capi me habló sobre su maldición y ella no parece recordar nada, pero mientras la traía ella dijo tu nombre

Cuando Gerheade les dijo que había terminado, dejaron a Tear y Zeldris a solas

—Por fin te encuentro, Tear —Tear lo observó en silencio, pues no lograba recordarlo —Soy Zeldris

—...Lo siento, pero...no te conozco

—... No es así —afirmo Zeldris —Nosotros nos comemos, puede que no hace mucho tiempo, pero si lo suficiente

—Quiero irme...

—Tear —Zeldris observó la muñeca de Tear y sonrió —Aun la conservas...la pulsera

—Cuando me di cuenta, ya tenía esta pulsera, aunque no sé de dónde la saque

—Yo te la di...antes de separarnos —Zeldris se quitó su guante y le enseñó la pulsera —Cuando te la di, lo hice por este momento, para que supieras que puedes confiar en mí

Sin alguna razón para Tear, ella comenzó a llorar, sintió un gran dolor en su pecho, pero distinto al dolor físico, para ella al escuchar a Zeldris decir eso, fue como llenar un enorme vacío que hasta ahora ella no había logrado

—Uh...no entiendo nada...es doloroso

Zeldris abrazo a Tear, ella simplemente lo dejo hacerlo, aunque su mente no lo recordará y no confiara en él, su corazón si lo hacía y eso era suficiente para ella, decidió seguir a su corazón y confiar en el hombre frente a ella que al igual que ella, estaba llorando

—Iremos con Meliodas para que el hablé con Merlin

—Si

Ambos salieron del bosque de las hadas tomados de las manos y un poco sonrojados ya que las hadas les aplaudieron y despidieron arrojándoles pétalos de distintos colores

—Espero que todo salga bien para ellos —dijo Jericho

—Lo hará —dijo Ban —Bueno, es hora de dormir un poco, estoy cansado

— ¿Ah? Hoy es nuestra cita, así que no puedes dormir

— ¿Que cita? No recuerdo algo así —Jericho hizo un puchero molesta —... Entonces ven a dormir conmigo

—... ¡Lo haré!

Zeldris y Tear se reunieron con Meliodas, Elizabeth, King y Diane en el Boar Hat, hablaron sobre todo lo ocurrido durante los meses en que Tear estuvo ausente y sobre contactar a Merlin para que finalmente la memoria de Tear fuera restaurada. King y Diane se despidieron ya que tenían asuntos que atender, mientras Meliodas de comunicó con Merlin a través de una esfera dejada por ella misma antes de volver a Camelot con Arthur

—Entiendo —dijo Merlin —Pero según mis investigaciones, hay algo que deben saber ahora mismo

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Hola, aquí otro capítulo 💞 Estoy feliz por haber llegado a los 1k muchas gracias por leer esta historia y apoyarme

El Hada Y El Demonio (Zeldris) Nanatsu No TaizaiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora