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Alex

-Hermanoooooo levántate se está haciendo tarde para ir a la escuela- tenia demasiado sueño no quería levantarme, Diooosss porque mi hermana tiene que ser tan puntual.

Poco a poco fui abriendo mis ojos hasta poder localizar a mi hermana la cual estaba parada en el marco de la puerta mirándome seriamente. Ya va a empezar con la misma pelea de todas las mañanas para ser enana tiene un carácter del diablo. Para ser gemelos éramos muy diferentes.

- Alexandra te pido que no empieces con lo mismo otra vez.

- Si no quieres que, según tú, empiece con lo mismo ¿qué te cuesta acostarte temprano y poner la alarma para que no tengas que escucharme peleándote?

- Esta bien prometo que hoy dormiré temprano, enana.

-Deja de llamarme así que seas un poste con patas no te da el derecho de decirme enana.

Levante las manos en señal de rendición cosa que la hizo reír.

La relación entre nosotros siempre había sido genial. Nuestros padres se habían ido de viaje hace un mes y nos dejaron a nosotros en casa con la excusa de que pronto empezarían las clases y no podíamos ausentarnos.

- Avanza Alex, te juro que si por tu culpa no llego a ver a Leo te quedaras sin bolas.- gritó desde la cocina.

- Ya termine relájate no entiendo cuál es tu obsesión con el tal Leo ese si cuando le hablaste le valiste madres.- hablé mientras bajaba las escaleras a toda velocidad.

- Atrévete a repetir eso- dijo mientras me apuntaba con un cuchillo de mesa.

- Ok ya cálmate y vámonos para que logres ver a tu amado Leo- rodé los ojos y camine hasta el auto.

La enana se montó y nos dirigimos a la escuela.

Digamos que Alexa tiene una pequeña obsesión con el tal Leo. Vamos a ser honestos, se puede decir que ella acosa a Leo sabia su nombre, donde vivía y hasta el nombre de la bisabuela que él nunca conoció sin ni siquiera haberle hablado. Nunca sabremos cómo consigue esa información pero espero que no esté en algo ilegal o que se yo. Ayer me había contado sobre la conversación que tuvo con el pero por lo que veo no se le va a hacer fácil crear una amistad con ese chico. Lo único que pude hacer fue desearle suerte ya que no me gusta meterme en sus problemas porque nunca salgo bien.

Al llegar a la escuela si Alexa pudiera volar creo que lo hubiera hecho porque ni siquiera me dejo apagar el auto bien y ya ella había salido corriendo hacia la entrada.

-Esta enana algún día se va a lastimar si sigue haciendo eso- hable conmigo mismo mientras bajaba del auto y me dirigía a la entrada de la escuela.



Leo

Coloqué a Ian en la cama y sin hacer ruido fui a mi habitación.

No sé qué me pasaba pero no logre conciliar el sueño, toda la noche estuve pensando en Ian y como le quedaba aquella camisa ancha que dejaba a la vista sus delgadas piernas. Si seguía así iba a terminar loco.

Eran las 5 de la mañana y aún no había dormido nada. Me levante y fui al baño al salir la puerta de la habitación en la que le había dicho a Ian que se podía quedar estaba entreabierta. Me asome y vi que aún seguía durmiendo, ¿si entraba no se daría cuenta cierto? Abrí la puerta con cuidado y me acerque a la cama en la cual se encontraba aquel chico con cabello rojizo durmiendo plácidamente. Me quede observándolo por un momento. Se veía tan hermoso y calmado. Mi mirada recorría todo su delgado cuerpo hasta detenerse en sus piernas. Tenía tantas ganas de acariciarlas. No podía aguantar esas ganas en ese momento no era yo mismo. Fui acercando una de mis manos a su muslo derecho, su piel era tan suave tan pálida y bella. Quería tocar todo su cuerpo y no parar nunca. Deslice mi mano logrando así subir la camisa hasta su abdomen, dibujaba pequeñas figuras imaginarias en su piel mientras seguía observándolo. Me sobresalte al escuchar un suspiro por parte de Ian el cual se encontraba ahora con sus labios entre abiertos. Mi vista se posó en sus labios y lentamente me incline hacia él. Me encontraba a tan solo centímetros de sus labios me acerque un poco más para poder lograr mi cometido pero...

- ¿Leo?- Me puse más nervioso que nunca al escucharlo hablarme.

-Buenos días-sonreí-aún es temprano solo vine a ver si te encontrabas bien sigue durmiendo-hable con un gran nerviosismo. Espero que no se haya dado cuenta de lo que estaba a punto de hacer.

-Esta bien-sonrió amablemente- gracias por todo Leo- dijo mientras se volvía a quedarse dormido en cuestión de segundos.

(...)

Luego de lo que había sucedido me di una ducha y fui a la cocina a hacer el desayuno. Desperté a Ian y para mi sorpresa le encanto el desayuno. Le tuve que prestar uno de mis uniformes ya que obviamente el no tenia, le quedo un poco grande pero no demasiado. Después de que me dijera gracias un millón de veces aun diciéndole que no era necesario, fuimos a la escuela.

Enamorado del mayor idiota de la escuela (Yaoi/Gay) [Editando]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora