Nuevo Comienzo®

.38.

Anhelo: Como que no están?

Yuzuko: a esta hora siempre están aquí... mejor voy a revisar las otras habitaciones

Yo: y si están en la casa de papá?

Yuzuko: tenemos que ir!

Afortunadamente la casa de papá quedaba muy cerca de ahí y no fue necesario caminar tanto pero Yuzuko no tenia la llave de esa casa.

Saul: Y ahora que van a hacer para entrar?

Yuzuko: En la parte de atrás hay un árbol que tiene una rama muy larga y por ahí puedo entrar

Jade: yo no se trepar árboles ;-;

Víctor: no te preocupes, yo te ayudare

Anhelo: yo tampoco se, a mi quien me va a ayudar? :'v

Yo: nadie, por estúpida

Todos menos Anhelo pudimos entrar, papá y mamá tampoco estaban en esa casa, y no podían haberse ido a trabajar ya que todas sus cosas estaban ahí.

Jade: que es esto?...

Víctor: que cosa?

Jade: es... Una especie de contrato, alguna información esta borrosa, hasta abajo dice una dirección

Yo: espera... Esa no es... La dirección que decía en aquella pagina de la deep web?...

Yuzuko: t-todo esto me esta dando miedo...

Víctor: deberíamos llevarnos esto, quizás nos pueda servir para mas tarde

Anhelo: *grita desde fuera* Ya terminaron?! Apresurense que ya me aburriii!!!!!

Yo: tengo un mal presentimiento... no parece que hayan estado aquí recientemente... pero bueno, si ya no hay nada mas que nos sirva, podemos irnos

Saul: espera, debemos tomar al menos un botiquín o algo, en caso de una emergencia ya estaremos preparados

Yo: buena idea, tu ve a buscar un botiquín, Víctor y Jade vayan a buscar alimentos que no puedan estropearse y yo iré a buscar el arma que papá siempre guardaba...

En cuestión de minutos reunimos todo lo necesario, tratamos no llevar tanto para que el camino no sea tan pesado, salimos de la casa antes del anochecer y le dimos a Anhelo la mayoría de las cosas para que se las llevara ella.

Noté que Yuzuko estaba preocupada por nuestros padres, yo no le dije nada de lo que Liliana había investigado, aquello sobre que decían que no tenían hijos, quizás si Yuzuko se enterara se pondría a llorar, no es como si me importara, pero detesto que llore, me dan ganas de callarla de un golpe.

Oscureció totalmente cuando volvimos con Kaoru y los demas, no les pudimos explicar lo que encontramos porque ya se habían dormido, solo hicimos lo mismo y en la mañana hablaríamos sobre lo sucedido.