Cap.18. "Cuando las almas se vuelven a unir"

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Desde que Carlos y Cristian rompieron, Cristian llamaba día tras día, noche tras noche a Carlos por teléfono, pero nunca obtenía respuesta, Carlos no le cogía el teléfono, por una parte quería hacerlo cuando le llamaba pero por otra no.
-Menudo cabrón..- dijo Martina, se encontraba en casa de Carlos, bueno, lo que era su nidito de amor.
Carlos no paraba de llorar -Pero yo le quiero..-
-Carlos...- Martina se le acercó -¿Lo superarás,si? Cualquier cosa me tienes aquí, y lo sabes... No te mereces a ese capullo..-
-Martina... Es que.. Te juro que aún le quiero...- dijo Carlos secándose las lágrimas
-Carlos, es normal.. pero en un tiempo te darás cuenta de que era un verdadero capullo, y te va a dar igual-
-Quiero volver con él...-
-¿Pero a caso me estás escuchando?-
Carlos suspiró
-Carlos tienes que pasar página
-No puedo...-
-Que si.. Ya verás..-
-Sólo quiero estar con él..- dijo Carlos sollozando con las manos en la cara
Martina estaba apunto de abrazarle pero cambió su reacción
-Carlos, ¿Eres idiota?, ¿Como vas a volver con alguien que te ha puesto los cuernos vete a saber cuántas veces?- dijo Martina con un tono serio
-¿Que quieres que haga? Le quiero..- dijo Carlos apartando lentamente las manos de su rostro
-Carlos... Llegas a volver a salir con Cristian.. y juro que no me vuelves a ver más..-
Carlos se volteó a verla lentamente con una expresión sin vida, solo con sus ojos llorosos y la nariz rojiza
-¿Lo dices enserio..?- le dijo Carlos
-Si, no me gustaría tener de amigo a un gilipollas como tú... Porque lo serías si vuelves con él..- le respondió Martina con un tono frío
La expresión de Carlos cambió rápidamente
-¡P..pues está bien! ¡Quizá vuelva con él! ¡Porque es mi maldita vida y haré lo que me de la gana, no lo que me digas tu! Cristian tenía razón.. Tienes envidia de lo nuestro..-
-¡¿Pe.. perdona?! ¿Yo? ¿Tener envidia? ¡Ese enfermo te ha comido la cabeza! No soy tan subnormal como tú para volver con alguien que me ha puesto los cuernos, y si.. es tu maldita vida, haz lo que te de la real gana, ¡Pero ya sabes lo que pasará con nuestra amistad..!- Martina se levantó y se fue
Carlos se quedó mirando al suelo, con la mirada perdida.

Al día siguiente llamaron a la puerta del piso de Carlos, no era nada más ni nada menos que Cristian.
Carlos se sorprendió y abrió
Y antes de que ambos pudieran decir algo, Cristian le agarró de la cintura cariñosamente, lo acercó a sus labios y le besó, un beso intenso y apasionado que duró varios segundos
Cuando Cristian le soltó habló
-Mira... Lo siento muchísimo, siento el daño que te he causado, actué sin pensar en el dolor que te podría haber ocasionado por ser tan idiota.. Te fui infiel y no se ni porqué.. Soy un miserable pero.. No he podido dejar de pensar en ti estos últimos días. No te merecías que te hiciera daño porque eres la persona más especial que he conocido nunca y... No sé si me vas a perdonar porque ni yo mismo lo hago pero no sé.. Podríamos ser una pequeña familia de nuevo..- A Cristian se le empezaron a humedecer los ojos, se le habían puesto de un color azul intenso y brillante, eran realmente bonitos.
Carlos se quedó petrificado al escuchar todo eso y se puso a llorar y se abalanzó encima de Cristian abrazándole
-Te amo...- Susurró Carlos con la cara apoyada en su hombro
-Yo también..-
Se separaron un poco de modo que solo hubiera 1 cm de distancia entre sus labios, hasta que se unieron con otro beso apasionado, poco después entraron en el piso y cerraron la puerta, se fueron al dormitorio, no dejaban de besarse en el recorrido. Cristian tumbó cariñosamente a Carlos a la cama y le quitó la camiseta, acto seguido se quitó la suya y se volvieron a besar, uno encima del otro Cristian se restregaba encima suyo, poco después su lengua se fue deslizando hacia los pantalones de Carlos y se los desabrochó y le quito los calzoncillos, y se la empezó a chupar
Carlos soltaba pequeños gemidos
-Ahh..~ Cuanto echaba esto de menos.. ahh..~
Poco después Cristian se incorporó un poco y se quito sus pantalones y calzoncillos y le abrió las piernas delicadamente a Carlos
-Hazlo.. Hazlo por favOOOHH..~ Cristian te amo..~ Sigue..~
Cristian le volvió a besar mientras no dejaba de moverse
Poco después agarró a Carlos de la cintura y lo volteó de manera que se quedara en 4
-Gime mas fuerte por favor...- le susurró Cristian al oído
Carlos guiado por la pasión cedió
Más tarde Carlos se sentó encima de Cristian y con sus cuerpos unidos y pegados por el sudor, Carlos trotaba encima de él

La pasión del momento y de la reconciliación hizo que estuvieran varias horas en aquel escenario

Cuando terminaron, jadeando y abrazados, Cristian le acariciaba cariñosamente el cabello hasta que se quedaron profundamente dormidos.
Dos almas se habían vuelto a juntar

Una historia de locos: ¿Me he enamorado de un psicópata?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora