Cap.25. "Ahora todas las piezas encajan"

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-Hace años en esta mansión vivía Marc Robinson, un destacado pintor de Los Ángeles, el cual estuvo mucho tiempo saliendo con el Sr.López. Marc vino a España y fue como se conocieron y empezaron a salir, hasta que un día se tuvo que marchar a Los Ángeles de nuevo, eso dejó destrozado al Sr.López, Desde entonces el Sr.López ha estado durante muchos años enfadado con él, a medida que fue pasando el tiempo ese enfado le trastornó, y para "desfogar" se hizo asesino a sueldo en "La calavera rota"... Es el tatuaje que tiene en su brazo izquierdo...
-¡Espera...!- le cortó Carlos -¿Que es la "calavera rota"?
-Es como una "asociación" o.. mafia, de asesinos a sueldo, y allí estaba López.-
Carlos y Cristopher se quedaron muy atónitos
-Al final si que era verdad...- susurró Cristopher con tono triste derramando una lágrima
Carlos le abrazó de nuevo y le dio un beso en la mejilla
-Tomaros el tiempo que queráis, cuando estéis listos sigo..- dijo la chica
-Si, sigue- le dijo Carlos
La chica retomó la historia por donde se había quedado
-Entonces, fue cuando empezó a salir contigo... Lo dejó por un tiempo, ahí fue cuando le volvió la cordura... Y, cuando se hizo famoso, esa fama, el poder, el dinero y la pérdida de lo que le quedaba de familia, su hermana... Le habían vuelto a trastornar, volvió con las drogas, el alcohol... Estaba cegado totalmente al poderío, y siempre quería más y más, y eso también le agobiaba... Y... Cuando volvió a ver ese cuadro de Robinson con la dirección de esta mansión, le vinieron los flashbacks... Trastornándole aún más, él sólo pensaba en dos cosas... Conseguir esta mansión para sumar su poder... Y matar a Marc Robinson para conseguirlo... Y así lo hizo...-
Carlos y Cristopher con los pelos de punta, un frío escalofrío recorrió sus cuerpos al escuchar eso último, con los ojos como platos clavados en la mirada de la joven, fría y serena, mientras contaba la historia.
Varios segundos después la joven siguió
-...Así que, fingió su muerte en España, borrar su rastro allí, para empezar como alguien nuevo, con más poder, en Los Ángeles... Y pagó millones a cadenas españolas televisivas, prensa y radio para que no dijeran nada sobre él en su estancia en Los Ángeles y es por eso que tampoco quiere que vengan españoles en su mansión.
Actualmente el Sr. López es uno de los hombres más ricos de Los Ángeles, siendo el jefe de la empresa de Calvin Klein, y varias empresas más...-

Varios segundos después para que ambos asimilaran toda la información, Carlos habló
-Ahora ya encajan todas las piezas...Y... ¿No se ha investigado nada sobre la muerte de Marc?-
-La verdad es que no mucho, no se encontró al asesino y se cerró el caso- le respondió Jane
-Y... ¿eres la única persona que sabe todo esto aparte de ahora nosotros?- preguntó Carlos
-No exactamente...Yo le oí varias veces hablar sobre esto, con lo que al parecer era gente de confianza, amigos suyos, yo les escuchaba siempre a escondidas, hasta que un día me pilló y es por eso que estoy en este sótano... Llevo 3 meses aquí...- dijo Jane
Carlos se incorporó con un poco más de fuerza
-Entonces hay que encontrar el modo de salir de aquí, y delatar al capullo de Cristian- dijo
Cristopher, sin mediar palabra, sólo escuchaba, sin poder creerse nada, miró atónito a Carlos
-Pero para ello necesitaremos pruebas de todo lo que ha hecho...- dijo Cristopher, después de bastante rato sin hablar
-Las conseguiremos...- dijo Carlos con confianza

De repente se abrió la puerta de golpe, era un hombre que les había traído la cena para ellos, dejo los platos sobre una mesa, y apunto de marcharse, Carlos se abalanzó encima de él
-¡Corred!- gritó Carlos
Jane y Cristopher no se lo pensaron dos veces y salieron disparados, al cruzar el pasillo y subir las escaleras que ya daban a la entrada del salón, se encontraron con dos guardias, y con Cristian y las mujeres de antes.
Jane y Cristopher corrieron en dirección contraria pero los guardias les consiguieron atrapar, y como si fueran esclavos, les pusieron unas esposas en los brazos y pies.
Cristian bajó de su extraño trono y se acercó a ellos, con una sonrisa malvada.
-No podréis escapar de mi... Tan fácilmente...Y...- Cristian se les acercó aún más -En un par de meses, no podréis ni hablar...- Dijo con una mirada de loco, sacando del bolsillo un poco su pistola
-¡¿Que!?- exclamaron ambos
-Take them- (Llevárnoslos)- dijo Cristian mirando a los guardias y haciéndoles una señal, los guardias cedieron y los llevaron al sótano
-¡Vamos! ¡Soy tu hijo! ¡¿No te acuerdas de eso, maldito capullo?!- Exclamó Cristopher sin pensárselo dos veces, se le escapó a causa de la rabia y traición que sentía
Cristian se giró con una mirada sombría y aterradora
-Deteneos..-
Los guardias, como perros, obedecieron a Cristian.

Cristian se acercó a Cristopher con paso acelerado, y le agarró del cuello de la camiseta a Cristopher, acto seguido Cristian le pegó en la cara.
Jane lo miraba con rabia intentando soltarse pero no podía
-No te pases de listo conmigo, niñato... Aquí el que tiene el poder soy yo...- le dijo Cristian con esa mirada sombría y demente clavada en los inocentes ojos humecedicos de su hijo.
Cristopher intentaba contener las lágrimas pero no podía.
-¡Déjale en paz mamonazo! ¡Cabrón!¡Enfermo! ¡Que estás enfermo!- exclamó Jane con rabia-
Cristian se giró hacia ella sin cambiar la expresión y medio segundo después le dio un puñetazo en la cara a Jane y la agarró del cuello de la camisa
-Cállate maldita perra... ¡Me tienes harto!-
Acto seguido Cristian sacó la pistola y apuntó a Jane
-¡No!- exclamó Cristopher
Cristian la disparó
-¡Noo!- exclamó de nuevo, sollozando
-Bury this bitch and take the brat to the basement- (Enterrad a esta perra y llevaros al niñato al sótano) dijo Cristian, un guardia se llevó a Jane mientras el otro se llevaba a Cristopher al sótano y lo encerró de nuevo.

-Cristopher cariño... ¿Que ha pasado?- le preguntó Carlos preocupado al verle llorar
Cristopher se abalanzó encima de Carlos y se puso a llorar fuertemente
-Pero... ¿Que ha pasado? ¿Y Jane?- preguntó Carlos
-Pa... Cristian... la ha... matado...Y... él... él me ha pegado...- dijo Cristopher sollozando en el hombro de Carlos
-¡¿Que?!- exclamó Carlos, apartando a Cristopher -
-¡Hijo de mil putas! ¡No eres ni una persona...! Cabrón...- Dijo Carlos golpeando la puerta cada vez bajando más el tono a uno triste hasta que se detuvo y se sentó en el suelo con la mirada perdida.
-Todo esto es culpa mía...- dijo Carlos
-¿Qué? ¿Porqué?- dijo Cristopher secándose las lágrimas
-Porque yo os he hecho salir... Y he hecho que la maten... y que te peguen a ti...-
-¡¿Pero que estás diciendo?!- exclamó Cristopher enfadado levantándose -¡La maldita culpa es de Cristian! ¡Todo esto es por él ! ¡Es un psicópata! ¡Y nos va a matar!-
Hubo unos segundos de silencio
Carlos volvió a poner la mirada perdida en el suelo
-Además... Nos lo ha dicho... Dijo que en un un par de meses no podríamos hablar y nos enseñó su pistola...- Cristopher se puso a llorar de nuevo
Unos segundos de silencio después
-No...-Dijo Carlos incorporándose- ¡No permitiré que ese ser demoniaco nos mate!- gritó Carlos
Cristopher lo miró atónito
-Cristopher... Tenemos que estar juntos en esto y no perder la fe... ¿De acuerdo? Ya verás como López morderá en polvo...- dijo Carlos con un tono seguro, agachándose a Cristopher y secándole las lágrimas
-De acuerdo...- dijo Cristopher con una sonrisa.

Una historia de locos: ¿Me he enamorado de un psicópata?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora