Your Time's Up Daddy 💕 [Hunhan]

Cap 2.

Todo ha sido un desastre. Llevo 3 días en esta casa y no había ni un solo día en el que tenga tranquilidad, pues los dos hermanos se encargaron de que fuera así.

Día 1:

Me desperté y fui a ducharme. Cogí el champú, me lo puse en el pelo y empecé a masajear para hacer espuma. Cuando, de repente sentía que estaba tocando como una especie de gelatina con las manos, ¡era slime!

Quise mojarlo con agua para ver si podía quitarlo pero a los segundos el agua dejó de salir y se pudieron escuchar las carcajadas de Sehun y Kyungsoo.

Cuando Siwon llegó a casa, Luhan le contó lo que pasó y este regañó a sus hijos, lo que les hizo enfadar bastante. Poco después apareció un hombre, era la madre, Kim Heechul, que al verme  me abrazo muy fuerte, tanto que casi me estrangula. Pero me cayó bien.

Era un hombre guapo, pelinegro con ojos marrón oscuro, su pelo parecía sedoso y se veía atractivo con ese traje de marca cara.

Día 2:

Esta vez me tomé la molestia de usar una pastilla de jabón en vez de líquido, todo parecía tranquilo, demasiado tranquilo... Hasta que el agua paso de estar tibia a caliente, sentía que estaba quemándome en el mismísimo infierno. Rápidamente salgo y cojo la toalla para cubrirme, miré mi cuerpo en el espejo, estaba rojo por todas partes.

Salí el baño con dificultad y llorando cogí el móvil e intentaba explicarle lo que había pasado a Siwon y él me dijo que me pusiera una bata y lo esperara para que me llevará al hospital.
— ¿Qué, ya te has chivado a nuestro padre?— dice Sehun con sorna.

— Es que me duele...— llora fuerte dejándolo paralizado en su sitio.

— Oye...— tartamudea nervioso m*****— lo siento Luhan. ¿Te duele mucho?— preguntó preocupado.

El rubio asintió con la cabeza sin dejar de llorar. El pelinegro iba a abrazarlo cuando soy un portazo, su padre acababa de llegar.

— ¿Luhannie?— gritó.

— ¡Estoy en mi habitación!

Se podían escuchar los pasos acelerados de Siwon subiendo las escaleras. Sehun no sabía qué hacer, pues fue su culpa y su padre le iba a echar la regañina del año, pero estaba arrepentido por lo que hizo. No había medido las consecuencias y claramente se había pasado; a través de la piel que dejaba al descubierto la bata podía observar las consecuencias de sus actos.

— Sehun— gruñe alguien detrás de él, era su padre— ¿Qué haces aquí? ¿No te parece suficiente lo que le has hecho?