Un número más ~/ Miguel Rivera x Marco de la Cruz x Hiro Hamada

Ya no eran niños

Los años han pasado Hiro, Miguel y Marco seguían siendo "los tres mosqueteros" (apodados así por el Rivera) aquellos niños ya no eran niños, se convirtieron en gente "responsable".

Hiro se rehusaba a dejar a Miguel con Marco, por lo que no quería volver a San Fransokio. Su tía con cierta pena estuvo de acuerdo, ella sabía que el momento llegaría.

Marco superó el fraude de su tatarabuelo y ahora es un gran músico esforzándose por convertirse en leyenda.

Miguel también había progresado en la industria de la musica, ahora con 22 años era uno de los músicos más reconocidos en su país y fuera de este.

Los tres amigos seguían allí, al igual que la rivalidad por el amor de Miguel. Cada uno trataba de conquistarlo a su manera.

Marco (el más aventado) varias veces había llegado a la residencia Rivera con algún detalle para su " trocito de chocolate" (recibiendo ya varios chanclasos de mamá Elena).

Por otro lado Hiro tenía una manera más sutil de conquistarlo con leves muestras de afecto realizadas con vergüenza infantil. Halagos hacía ese mexicano que años atrás había logrado traerlo "así de pendejo".

Los dos lo hacían a su manera, pero la decisión caía en el más joven.

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Era una tarde soleada Hiro había hecho una visita a su tía y le había tomado más tiempo de lo previsto.

Tiempo sin Miguel.

Tiempo que Marco no desaprovechó.

Al volver a Santa Cecilia Hiro sentía como su mundo se derrumbaba con una simple escena. Allí, frente a él, cada vez más cerca se encontraban Marco y Miguel. Tomados de la mano.

No le hubiera afectado de no haber notado la sonrisa burlona y altanera en el rostro de Marco, no necesita saber más. Pero... Por si las dudas....

-Ustedes.....-No podía, no quería siquiera mencionarlo.

Marco hizo más grande su sonrisa - Si, Miguel y yo somos pareja.

Se acabó.

Marco había ganado.

Marco logró obtener el amor de Miguel