Killer Eyes (2min)

Capítulo 3: Tortura

Tortura, si Minho tuviera que darle una palabra a lo que estaba haciendo Lee Taemin con él, esa era tortura. La última semana se había encargado de hacer su vida un infierno. Porque no le alcanzaba con pedirle trabajos interminables que jamás podría completar en tiempo y forma o queriendo que adivine lo que estaba pensando en cada instante, no; Él lo humillaba y lo basureaba en el proceso y eso era algo que estaba colmando su paciencia. No lo quería ahí y se notaba, pero no tenia que tratarlo así. Lo peor, era que, a pesar de todo, aun no podía sacarlo de su cabeza. Su noche juntos se repetía una y otra vez en su mente, atormentándolo. Su blanca y tersa piel... su dulce boca recorriendo su cuerpo... su experta lengua saboreando su...

- CHOI – grito una voz chillona, interrumpiendo su fantasía –

- Si – respondió tratando de verse profesional y nada nervioso, mientras terminaba de teclear unas cosas en la computadora que le habían asignado y lo miraba a los ojos, como a él le gustaba –

- ¿Acomodaste las carpetas que te pedí? - cuestionó instigador como siempre. Había aprendido dos cosas del joven trabajando con él. No tenía paciencia y le gustaba el orden.

-sí señor Lee - respondió como sabia que le gustaba que lo llamarán. Nadie le decía su nombre, excepto Onew. Él era el único con el que parecía fraternal.

- ¿y mi reunión? - pregunto enojado, atravesándolo con la mirada.

-la reprograme - hablo firme. Sabía que no le gustaría, el chico era ansioso con sus actividades y le gustaba tener todo lista para antes de que se lo propusieran siquiera. Pero no había forma de colocar la reunión, si tenía esas secciones de fotos. Y a pesar de que iba a querer matarlo, prioridades son prioridades. Y las fotos estaban antes.

- ¿para cuándo? -inquirió molesto por lo que le decía el pasante

-el jueves - casi suspiro sabiendo lo que le esperaba

-falta mucho ¿no podías ponerlo antes? – le recrimino sin poder retener su ira - ¿¡Porque contratan gente sin experiencia!? ¡Jinki! -grito al joven que ni siquiera se encontraba cerca.

- no tenía otro horario - explicó tratando de mantener la calma. Los primeros días había perdido los estribos y se estreso tanto que volvió casi llorando a su casa. Hoy no. Había aprendido a mantener la calma. Lee Taemin no lo definiría - ¿Prefería pasar la reunión con el diseñador? - cuestionó sagas. Sabiendo que eso era lo último que haría. La boca del rubio se abrió de par en par por la respuesta. No podía creer que un simple pasante lo estuviera tratando de pasar por encima.

- es tu trabajo acomodar mi agenda, no el mío- respondo molesto. Lo quería fuera, lejos de su empresa y lejos de él. Desde el principio cuando lo vio parado junto a su jefe, supo que no podía ser bueno que él estuviera ahí. No cuando se habían acostado juntos, pero escuchar a sus compañeros decir que el chico tenía potencial como modelo lo había sacado completamente ¿Que podía saber ese chico de modelaje? ¿Tenía alguna idea de lo que era esa vida? Claro que no y no permitiría que pasara, porque a pesar de que había odiado los comentarios, sabía que eran fundados, porque el mismo lo había notado la noche que estuvieron juntos... su cuerpo torneado, sus rasgos varoniles y sus ojos... esos ojos que lo habían hecho ver las estrellas... "mierda... tengo una erección" - Quiero que acomodes los catálogos de verano para la tarde - hablo duro y cortante, tratando de distraerse de las imágenes de ellos desnudos que ahora poblaban su mente.

- pero son muchos - se quejando el alto dejando que las emociones lo dominarán por un segundo "¿Ya te estás cansando Choi?" pensó victorioso el modelo. Le gustaba alterarlo, su actitud neutral que al principio le había atraído, ahora le molestaba. No le gustaba ser indiferente para la gente y lograr manipular sus emociones lo hacía sentir un poco más poderoso frente a esta situación inusual en la que él era el único que podía salir perdiendo.