Una divertida historia adolescente

Pequeños cocodrilos

Mi papa es ese tipo de personas que ama los animales por lo tanto el me heredo ese gusto. A el no solo le gustaban los animales de granja sino que el apoya bastante la preservación de la vida de los animales en peligro de extinción. 

Uno de mis tíos tenia unas lagunas en su propiedad, estaban llenas de peces y otras criaturas. Un día decidió que seria interesante tener cocodrilos, esto también llamo la atención de mi papa.  Mi tío compro cocodrilos adultos, por el contrario, mi papa opto por cocodrilos bebes. Todo estaba resulto para que los cocodrilos llegaran a su nueva hábitat, pero hubo un problema con la laguna donde estarían los de mi papa.

De una forma u otra los cocodrilos terminaron en una pila de agua en el patio trasero de mi casa. Yo no sabia que ellos se encontraban allí. Un día salí a jugar cuando escuche un chapoteo en la pila. Al tener dos años y medio todo eso llamaba mi atención.  Me acerque y observe unas pequeñas criaturas. 

En mi inocencia pensé que eran inofensivas y empece a jugar con ellas. Me divertía de verdad. Jugar con ellos se hizo una rutina, aun que no lo crean ellos nunca me lastimaron de ninguna forma. Yo los consideraba mis amigos. 

Un dia yo salí tranquilamente a jugar con ellos, al acercarme a la pila me encontre con que uno de ellos estaba boca arriba. Lo toque y no se movia ni respiraba o eso pensaba yo. Sali corriendo a buscar a mi mama. Llore por la perdida de mi amigo. Mi mama le aviso a mi papa. El mando uno de sus ayudantes a sacar la pequeña critarua. 

El ayudante salio al patio y se acerco a la pila. Cuando el estaba listo para agarrar el cuerpo "sin vida" de la criatura. ¡Bom!  La critarua se dio vuelta rapidamente y trato de morderlo. El se asusto tanto lo cual provoco muchos gritos de su parte. Mi mama salio asustada.

-¿Que le pasa?- Pregunto asustada.

-¡El cocodrilo está vivo y casi me muerde!- Exclamó el.

-¡¿Que?!-Creo que a mi mamá casi le da algo, tipo un ataque al corazón.

Mi mamá llama a mi papá enojada. Le ordenó que sacara a esas criaturas de la casa. Ella le dijo que algo me pudo llegar a pasar a mi.

Ese fue el final de mi amistad con ellos. Muchos creerán que es mentira y otros que es una exageración. La verdad tengo vagos recuerdos de esto y mi mamá también lo recuerda. Ella no es de las personas que les gusta inventar cosas.

Ellos nunca me hicieron daño a mi ni nosotros a ellos. La pila donde estaban era muy grande y sólo eran tres.