·Parents· Adaptación · VERKWAN·

4: Chwe Hansol.

(Vernon Prov.)

Corrí hasta encontrar un médico. En menos de lo que pensé, tenían a SeungKwan sobre una camilla, haciéndole todo tipo de exámenes antes de confirmar que efectivamente, nuestro hijo necesitaba nacer antes de que sea demasiado tarde para cualquiera de los dos.
-Haga lo que tenga que hacer. -le dije al doctor.

Había logrado decir parte de lo que en verdad quería. Es decir había logrado decirle a SeungKwan que quería estar presente en el parto. Así que llamé a Joshua y a JeongHan, después me alisté con las ropas de sanidad necesarias. Se me explicó que la cesárea podría complicarse, de ser el caso, si me ordenaban salir, tenía que obedecer.

Por favor, todo tiene que salir bien.

En la sala de parto, Boo se veía muy sudado y nervioso. Los dolores había cedido un poco a causa de la epidural, pero aún así dejaba ver sus emociones.

Y es ahí dónde estoy ahora. Me acerco a él una vez dentro y tomo su mano derecha. Noto que está sorprendido. Inclinó mi cuerpo y pegó mi frente a la suya.
-Lamento mucho haberte debajo solo todo este tiempo... -Comienzo a decir. Sí, no era el mejor momento ni lugar, mi segundo nombre debería de ser cambiado por estúpido o algo por el estilo, porque continuó hablando -Todo es mi culpa, hoy estaba tan enfadado... tan... idiota. Y no tengo excusa, no debí haberte tratado como lo he hecho. Boo, sé esto desde a hace tiempo, pero no tenía el valor ni la decencia de hablar contigo... ¿cómo arreglar las cosas si todo lo que hemos estado haciendo es insultarnos? -Siento que el apretón que le daba es devuelto. -¿crees que puedes perdonarme y darnos una oportunidad?

SeungKwan repita con algo de dificultad.

-¿sabes? -Dice -Un hijo no lo hace uno solo, maldito desgraciado... Ambos participamos. No sólo tu vida vio su futuro torcerse para otro rumbo, el mío también. Pero entiendo lo que dices, puedo hacerlo, por su bien... por nuestro bebé.

No dejamos de mirarnos ni solté su mano durante lo que duró el parto, al menos hasta que escuchamos el llanto a todo pulmón de nuestro hijo. Escucharlo le dio un giro a mi corazón, haciéndome sentir demasiadas emociones encontradas.

Suelto la mano de Seungkwan y me acerqué a la enfermera que lo tomaba entre sus manos. Tan pequeño, tan lindo, tan puro.

Una vez más me doy cuenta lo errado que he estado todo ese tiempo. Me había perdido todas las ecografías, las compras de sus cosas, sus primeros movimientos dentro del vientre de SeungKwan, sus patadas, toda su evolución, todo por ser un completo idiota, por haber pensado únicamente en mí.

No puedo parar de llorar y recordar la noche aquella hace ocho meses atrás. Joshua me había dicho que había invitado a su novio, JeongHan y a su amigo. Cuando les vi, me dije que el chico no estaba mal; trasero grande y respingón, piel blanca, mejillas regordetas, lindo, pasivo, ideal para servirme de compañía. Así que me acerqué a él con dobles intenciones. Una copa fue, otra vino, otra vuelve a ir, un par de roces, unas duras erecciones, y así terminamos en un cubículo de baño saciándonos.

Cuando vino con la noticia, y no hubo más opción que casarnos, me cegué. Lo odié. Éramos incompatibles ¿cómo hacerlo cuando éramos tan diferentes? Pero no vi lo más importante, que lo nuestro realmente podría haber resultado si hubiera puesto parte del empeño que SeungKwan puso.

En un comienzo, él era arisco, agrio, sarcástico y hasta egocéntrico, pero el tiempo sacó sus verdaderas emociones. En cambio yo me quede detrás del muro que me había construido, culpándolo, y después sintiendo demasiada cobardía como para salir.

-Quiero verlo... -Pide mi esposo al notar que la enfermera no trae al bebé. Vuelvo hasta él y tomo de nuevo su mano. Veo al médico seguir trabajando, seguro saturando la herida.

La enfermera dijo que esperáramos un segundo.

-Es hermoso, nuestro hijo es hermoso, Boo. Ahora lo verás- la enfermera finalmente se acerca-Mira, míralo. -Él lo toma entre sus brazos y besa sus manitas. Nuestro bebé seguía llorando y sus mejillas estaban muy rojas. -Tiene unos grandes plumones, igual que tú... sin ofender.

Mi pecho sigue en un mar de emociones, pero yo ya sabía una cosa, le quería y estaba muy orgulloso de mi pequeño bebé.

-Hansol -Aún era raro oírle decir mi nombre sin insulto alguno ¿podría acostumbrarme a ello? -No le hemos buscando un nombre... es decir yo pensé en uno, pero... - otra apuñalada de culpa que debía añadirme. Pero sabía cuál era, Joshua me lo había comentado. Acaricié el rostro de mi hijo, que difícil era pensarlo así, pero ahí estaba, era real.
-Se cuál es, y me gusta mucho. - SeungKwan me mira, desconfiado intento sonreír. -Pequeño, tu nombre es Chwe BonHwa. -le sorprendí.

Tal vez SeungKwan y yo no nos amemos, pero podíamos intentar llevarnos bien por aquel hermoso ser que tenemos en común . De hecho, estaba seguro de que podíamos lograrlo.

¿Qué tan difícil puede ser?

•••

Oh sí sí. 💖