-Voy con una condición-exige mi hermana.
-¿Cuál?-pregunto, un poco atemorizada.
-Me tienes que dejar que te elija la ropa, zapatos, complementos y ¡TE VOY A PINTAR!-me dice súper emocionada con sonrisa enorme. La verdad, es que nunca me e pintado...¿para qué? si total, nadie me miraba, y la ropa, me daba igual.
La miro, suspiro profundamente y asiento, mi hermana sonrie aún más y mira al reloj de su muñeca.
-¡Solo tengo hora y media para arreglarte! ¡VAMOS!-grita ella, tirandome del brazo para subir a mi habitación.
Lo primero que hace Rocío es abrir mi armario y revisarlo todo, y por la expresión que tiene, creo que no le gusta nada, no me extraña, todo son camisetas y pantalones muy anchos o feos.
-Mm, mejor te pones algo mío-me dice, dirigiendose a su habitación, a los 2 minutos vuelve con ropa en la mano.
Me entrega un pantalón corto alto blanco, una camiseta transparente azul cielo, que se vé un poco el sujetador, y unas sandalias azul cielo. Ella se pone exactamente lo mismo, menos los pantalones son negros y la camiseta y los zapatos rosas. Luego nos metemos en el baño y empieza a pintarme, me hecha rímel, sombra, lápiz de ojos y pinta labios de brillo rosa claro, y ella se pinta lo mismo. Cuando Rocío me dice que ya estamos lista, vuelvo a su habitación y me pongo delante del gran espejo que tiene mi hermana, parezco otra persona.
-Eres preciosa, hermana-me dice, apoyando su mano en mi hombro.
(Narración en tercera persona)
-J*der, ¡Dani, vamos ha llegar tarde!-dice Jesús desesperado, al comprobar que son las 17:57PM.
-¡Voy!-grita su gemelo desde la planta de arriba, se hecha un vistazo mas en el espejo y se arregla un poco más el pelo, listo.
Este baja las escaleras y ve a su hermano esperando en el salón. Van iguales, con unos baqueros negros cortos, una camisa blanca y unas vans negras. Salen de casa, no sin antes despedirse de su madre. Ambos caminan hacía la casa de las mellizas en un silencio incómodo, hasta que Jesús decide romperlo.
-¿Por qué has tardado tanto?-pregunta Jesús, un poco mosqueado.
-Tío, me estaba arreglando-dice su hermano, excusandose.
-Eso se lo cuentas a otro, a mi no, venga, dime ¿cuál de las dos es la afortunada?¿Andrea o Rocío?-pregunta con una sonrísa pícara.
-Jesús, no digas tonterías, ninguna-dice Dani, y se sonroja.
-Voy ha hacer como si no hubiera visto que te has puesto rojo como un tomate-dice su gemelo en una carcajada.
Y sin darse cuenta, ya han llegado a casa de las mellizas, Dani toca el timbre, y cuando se abre la puerta, no pueden creer lo que están viendo.
(Narración en primera persona, Andrea)
Tocan el timbre y bajo lo mas rápido posible, abro la puerta y veo a los gemelos vestido perfectamente iguales, pero sus miradas me asustan, me miran muy raro.
-¡Hola chicos!-saludo alegremente.
-Ho... hola-dicen sorprendidos al unísono.
-¿Os pasa algo?-pregunto un poco preocupada.
-¿Qué te has echo?-me pregunta Jesús, todabía flipando.
-Me lo ha hecho mi hermana-aclaro con una sonrisa.
-Pues tu hermana es la ostia-dice Dani mirandome de arriba a bajo.
-Ya lo sé, soy la mejor-dice mi hermana, que a aparecido de la nada por detrás mía.-¿Nos vamos?-pregunta ella, todos asentimos.
-¡Tened cuidado, y a las 10 os quiero aquí!-grita mi madre desde la cocina.
-¡Vale mami, te queremos, adiós!-gritamos mi hermana y yo al unísono.
Salimos de casa y damos un paseo hasta llegar al parque entre bromas, tonteos y risas. Nos sentamos en un banco y charlamos un rato, la verdad, estoy muy cómoda.
Noto la mirada de Dani sobre mi en todo momento, cosa que no me molesta. Cuando quiero darme cuenta ya son las 9.
-No ve, ya son las 9, que rápido pasa el tiempo con vosotros-dice mi hermana. Ella me mira con dulzura, y no sé el motivo y se dirige a Jesús-Vamos, que te voy a enseñar una cosa.
-¿El que?-pregunta Jesús extrañado.
-¡UNA COSA!-grita mi hermana, tirando del brazo a Jesús para llevarselo a saber donde.
-Jajaja, soy la única normal, estaís todos locos-digo descojonandome viva.
-Andrea-dice y yo giro mi cabeza para mirarle-Yo estoy loco...por ti-cada vez esta mas cerca de mi, ya noto su respiración contra la mía y cuando está a punto de rozar mis labios...me separo bruscamente.
-Lo...lo siento, Dani, todabía es pronto, no...no puedo.-digo intranquila.
-Da igual Andrea, solo quiero que sepas-me coje las manos-que te quiero, no sabes cuanto, desde pequeños, y he sido un estúpido, y queria preguntarte una cosa...¿tengo posibilidades?-pregunta con los ojos brillosos, y yo asiento-te voy a conquistar, eso tenlo seguro.-Me da un beso en la mejilla y se va. Al instante ya estamos mi hermana y yo volviendo a casa.
-¿Qué le has dicho?-pregunta ella de la nada.
-¿A quién?
-A Dani, tonta, he visto que te iba a besar y... te has separado.
-Me ha dicho que le gusto, pero, Rocío... no estoy lista, no he dado ni mi primer beso, y estos años solo he tenido una amiga, esto de ser sociable es nuevo para mi, tienes que entenderme-digo un tono tranquilo, pero a la vez de agovio.
-Te entiendo-dice mi melliza abrazandome.
(Narración en tercera persona)
Los gemelos entran en casa en silencio, ninguno de los dos ha dicho nada en todo el camino, saludan y cenan junto a sus padres, donde Dani intenta sonreir para evitar preguntas. Cuando terminan ambos suben a su habitación compartida, y se tienden cada uno en su cama, revisando twitter para responder cosas a los fans.
-Lo he visto todo-dice Jesús derepente. Su gemelo traga saliva y le contesta.
-Lo suponía...
-¿Te gusta verdad?-pregunta Jesús con una sonrisa.
-Gustar es poco-dice Dani esbozando una sonrisa.
-¿Qué te ha dicho?
-Que es pronto... que no puede y blablabla-dice Dani triste.
-¿Se lo has dicho?-vuelve a preguntar su hermano.
-¿El qué?-dice Dani soltando su móvil en la mesita.
-Lo de...-comienza a decir Jesús, pero su hermano le interrumpe.
-No, no se lo voy a decir-dice muy serio.
-Ella debería saberlo...-opina Jesús.
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¿Qué le estará ocultando Dani a Andrea? JAJAJAJAJA
Pues a leer el siguiente! comentad&votad que me dais inspiración, mañana subo sin falta, como siempre, un beso ;*
