Alejate Rubio Mal Teñido

IV

Capítulo IV

La noche pasó rápido, y el siguiente dia llegó, y con ello el último día de celo del omega, el cual se despertó con un pequeño problema entre las piernas. Además de un pésimo humor ya muy típico en sus despertares.

-Virgen Santa- gruño mirando al techo- Esto del celo me tiene hasta los cojones...- se levantó de la cama con cierto esfuerzo, para luego dirigirse al baño- Juro por mi madre que si el maldito Alfa ese estuviera aquí dejaba que me la metiera si así se me iba este puto calenton...- se metió bajo el agua fría de la ducha y se ducho en silencio pese a que por su mente pasaban todo tipo de comentarios de mal gusto y alguna que otra escena subidita de nivel con su alfa en aquella ducha

Más tarde, cuando ya salía de su hogar, y con un par de supresores encima, chocó con un muchacho realmente bajito, y de cabellera rubia, el cual se le quedó mirando hasta que ambos reaccionaron.

-Cuidado enano- gruñó Yoongi a lo que el otro chico tan solo le miro con una ceja alzada, y en ese momento el omega se pudo fijar que aquel era el muchacho que días atrás lo había observado en el parking, y que había visto en el bosque- ¿nos hemos visto antes?- acercó su rostro al del contrario para verlo mejor, pero este se apartó enseguida con cierto nerviosismo

-¿E-eh? No creo- se dió vuelta y empezó a caminar- nos vemos Yoongi- y al instante después de decir eso, se tapó la boca y salió corriendo

-¿Alguien me explica como mierdas sabe mi nombre?- preguntó a la nada mirando por donde se había ido el muchacho, pero luego de reflexionarlo, simplemente se fue hacia su coche y posteriormente a su trabajo donde lo recibió su queridísimo jefe con los brazos cruzados y expresión sería

Yoongi se encogió en su lugar y se las apañó para enfrentar a su jefe con la mirada, y para su sorpresa, este sonrió.

-La canción ha quedado genial Min, sigue así, aún quedan otros detalles, pero no es cosa nuestra, así que como estoy de buenas, te daré el día libre- y sin más se fue dejando a un Yoongi boquiabierto y confundido

Se dió media vuelta aún con la confusión a flor de piel y caminó hacía su coche, pero no llegó a entrar cuando alguien le abrazó por la espalda y quedó completamente rígido, para luego soltar una patada, oír un fuerte quejido y sentir como los brazos que le habían rodeado se soltaban al instante.

-Yoongi eres muy brusco...- dijo una voz conocida para el recién nombrado a lo que se giró

-¿Tae? ¿Porque coño me abrazas? Pese que eras un puto ladrón o secuestrador- comentó viendo como el rubio se sobaba la zona pateada y reía un poco, y por el rabillo del ojo, vió como otros tres rostros conocidos se acercaban corriendo, a lo que suspiró con cierta pesadez

-Ahhh... Lo lamento Yoongi, en cuanto Tae te vió salió corriendo, no nos dió tiempo a pararlo comentó un Jin jadeante después de haber corrido

-Pues da gracias que no le haya hecho algo peor, no me gusta el contacto físico innecesario- respondió con simpleza

-¿Tu que podrías hacer Min?- comentó el alfa pelirrojo soltando una risita a lo que se ganó una mirada asesina por parte del omega- pero eso sí, preferiría que no patearas más veces a mi omega

-Si si, lo que tu digas- dijo sin siquiera mirarle a la cara, y disponiéndose a entrar en su coche

-¿Hey azucarillo, porque no vienes con nosotros? Hoy íbamos a divertirnos un rato y uno más nunca viene mal- dijo Jimin con una sonrisa demasiado tierna para el gusto del pálido quien estaba dispuesto a negarse cuando fue interrumpido por Jin

-Y no vamos a aceptar un no. Así que vamos- dijo tomándole el brazo a Yoongi quien se soltó al instante aunque comenzó a caminar junto a ellos de manera pesada