Toda mi vida había sido realmente complicada al no poder estar cerca de la persona a la que tanto amor le tenia.
Cuando entre en tercer grado de secundaria lo conocí.
Hacia casi ya dos años de que me había ido a vivir a un pequeño suburbio de Estados Unidos. Toda mi vida había vivido en México hasta que mis padres se divorciaron y tuve que elegir con quien vivir.
En ese momento era claro con quien quería irme a vivir. Mi madre, esa persona a la cual recurría primero, la que me consentía. Algo tuvo que ver que ambas eramos mujeres y eso influía mucho en la comunicación.
A esto no me refiero a que mi relación con papa era mala, al contrario, él era mas que mi papa, era un amigo y confidente.Nunca entendí como fue que pasamos de ser una familia unida con excelente comunicación, a terminar viviendo sola con mama en otro país.
Ahora me arrepiento mucho de no haber vivido con papa.
Volviendo al inicio. En la escuela también se encontraban personas que hablan español, aunque muy pocas. Mary y yo, por ejemplo.
Mary es originaria de Venezuela, llego aquí en busca de una mejor calidad de vida.
Ambas tenemos dominado él ingles, aunque no a la perfección. Nos conformamos con el poder sobrevivir.
Y entonces un día él cruzo la puerta del salón de Biología.
-Good morning!- saludo él chico de recepción. Nos dijo que habría un nuevo estudiante de México, luego nos pregunto si habían alumnos que comprendían español, ya que el no sabia e iba a necesitar ayuda.
Mary, yo, y unos cuantos compañeros mas levantamos la mano. Al final, él chico paso a tomar asiento delante mio.
Mientras él profesor escribía en él pizarrón, toque él hombro del chico haciendo que girara.
-Hi! My name is Makena!
Me miro extrañado. De seguro habrá pensado en que no puse atención a lo que dijo él chico de recepción.
-ehh... Pues...
Baje mas la voz y susurré:
-Se supone que tienes que decir tu nombre.
Por un momento vi alivio en su cara. Estaba nervioso al no saber como contestar. O tal vez si sabía y temía a la conversación que podría comenzar hacerle, en la que no entendería nada.
Y no lo haría, solo habla ingles con las personas que no entienden él español.-Martín.
Y aunque decía ser de México, su cabello rubio, su tes clara y sus hermosos ojos verdes lo delataban.
A través de mi vista periférica pude ver como él profesor se giraba. Di unas palmaditas es su hombro para que se girara y no hubiese problemas. Pronto habría tiempo de conversar.
Y si que lo hubo.
Hablábamos siempre que podíamos. En media clase hablaba con él por celular. Ningún profesor logro verme, si no, hubieran retenido mi celular.
En cafetería nos juntábamos junto con Mary.
Iba a mi casa, así como yo a la suya.
Mamá solía molestarme diciendo que era mi novio, lo cual era mentira. Aunque lo admito, me gustaba, y mucho. Temía que lo que sintiera fuera amor.
Bueno, por lo menos en ese tiempo mama me ponía atención.
Todas las mañanas encontraba mensajes de buenos días, y cuando no era así, yo enviaba esos mensajes. La mayoría de las veces se quedaba dormido.