Sugar Baby M

I

Saben, se que la cosas no van bien en mi casa, que las deudas cansan, y más como veo a mamá. Hoy es martes la veo sentada en la mesa revisando las deudas un por una viendo si saldremos de una al menos en este mes.

Falta una hora para las clases y yo ya ando vestida y medio desayunada, en cambio mi mamá está levantada desde hace dos horas haciendo lo mismo sabiendo que acaba de llegar de trabajar doble turno, es lo que la mata.

Me siento en la silla como de costumbre- Mamá sabes que te puedo ayudar verdad?

Me mira como si trajera algo en la cara.

-Mi amor no te preocupes los problemas financieros son mi problema no tuyos.

-Pero mamá, te matas en el trabajo- me paro de la silla y me recargo de brazos cruzados en la pared- que quieres que haga, que vea como te matas, que vea como te desgastas por deudas que no son tuyas.

-Si mientras estudies yo te mantenga, soy tu madre no una vieja que no puede hacer nada,mi deber eres tu.

-Mama pero te quiero ayudar!!

-Ayudar mis ovarios tu a estudiar.

Y hací terminan las discusiones de mi mama y yo, de a diario.

No se como mi mamá y yo nos hemos soportado todo este tiempo sin matarnos pero bueno.

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Ya en la preparatoria ya estaba mas tranquila con Rafa, el estaba sentado en el escritorio del profesor en el receso mientras hablábamos de la clase de geometría.
La verdad no soy ni buena ni mala en esa materia, aun que me salte esa clase le entiendo a la siguiente sin que me expliquen.

Toda esa mañana-tarde pasada en la prepa me causaba dolor de cabeza con el sonido de las voces, gritos y demás, mi cabeza normalmente explota en dolor, y lo que hago es salirme a la terraza detrás de la explanada a acostarme en el pasto, y bueno hoy es uno de esos días, mi cabeza exploto de dolor.

-miia es normal que te duela la cabeza piensas en mil y un cosas- rafa de sienta a mi lado y se pone a leer.

-sabes no estoy pensando en nada tengo la mente en blanco, solo quiero que haci sean todos los días ya sin que mamá y yo peleemos, ser una familia.-talle mis ojos no quería llorar.

-ya no llores niña, estoy aquí.

Rafa, ese joven quien es mi amigo es el único que me entiende en esta situación, el apresar de no estar con sus padres vive bien trabajando por su cuenta y con lo que le dan sus padres. El es feliz y lo admiro a pesar de estar solo des pues que sus padres se divorciaron, el mantuvo su sonrisa y siguió adelante. El es mi ejemplo a ser fuerte y más.

Siempre pensé que la vida era tan mala con todos, que nos daba una lucha y una recompensa al final de ella. Uno siempre piensa que las luchas son cortas para unos, pero no sabemos como la enfrentan.

Él es mi ejemplo a seguir ya que en su tiempo fue destrozado por dentro pero logró salir a adelante.

Casa lugar donde de vivo con mi madre, si solo estuviera aquí.

Desde que se vive trabajando no me ve seguido la veo dos o tres veces por semana y eso solo 3 horas, si estoy grande lo se pero, necesito que me de amor. Yo le apoyaría en las deudas pero ella no lo quiere.

En la casa como cada día una o dos notificaciones de deudas, como siempre las recojo y las meto a la casa.

Estoy en la sala terminando la tarea, mi pose típica en este momento es recargada en el sillón con la cabeza colgando y con el lápiz en la boca. Mi estómago rogaba por comida y no podía negarme. Me levante de poca gana por que ni levantarme quería, en la cocina encontré lasaña de anoche, y la calenté, tome una bote de agua y me senté en el sillón.

Llevó más de cuatro horas viendo televisión, ya acabe la tarea y de comer. Solo esperaba la hora de dormir.

En estos días pienso en mi padre, se que no debo de pensar en el lo más mínimo ya que nos dejo y que el solo pensó en si mismo. No pensó en mi madre ni en mi solo en el, yo quería un padre y una madre. Pero tuve una madre con los suficientes ovarios para cuidarme.

Mis abuelos nos cuidaban, hasta que nos dejaron a la deriva.

Espero que mi mama me deje ayudarla.

En la escuela intento ser la mejor, día a día me esfuerzo por ello, ella vida siempre ha sido callada y dejando me de todos, pero desde que pensé en mi mama y en mi deje de hacerlo, me hice mala y me empecé a defenderme.

Ya volviendo a la realidad vi que mi madre llegaba a la sala, por la puerta de la casa.

-Hija, amor ya llegue, como estuvo la prepa.

-Normal, como siempre. Y tus trabajos?

-Renuncie a uno ya que me ascendieron a secretaria de presidencia.

Me quedé en blanco. Mama renunciar a uno por otro que tanto le pagaran por eso.

Después de hablar sobre el trabajo durante unas horas.

Después de aquello dormí hasta más tardar las 5 de la mañana, donde me levante.