Sugar Baby M

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Sentía que la cama estaba vacía,  el cuarto era iluminad por la luz que entraba desde el pequeño salón que presentaba las habitaciones.

me sentía aun con sueño, no me quería levantar de la cama, no se si era cansancio o pereza, o hasta l misma gravedad que no quería que me levantara, pero me cubrí con las sabanas esperando a que nadie me sacara de mi pequeño lugar.

Sentí como un lado de la cama se hundía por el peso de alguien, esa persona me destapo y con la sonrisa mas linda que para mi eh visto me daba besos en las mejillas.

—Arriba mi princesa ya es mas de medio día—seguía dándome besitos en las mejillas.

—No quiero —me volví a cubrir buscando estar escondida de el.

—Si no te levantas tendré que levantarte bebe.

Después de eso sentí su peso sobre mi, se recargó sobre mi y me abrazaba siendo el cúmulo de cobijas junto conmigo. De un momento a otro ya me estaba jalando la cobija para destaparme y yo la jalaba también, solo escuchaba su risa cuando la jalaba y me dejaba jalarla de un momento a otro la solté y me escondí boca abajo y me tapé con la almohada evitando que el me viera.

—Quiero dormir no hay clases y no tengo tarea quiero dormir

—Princesa debes levantarte, no debes sobrepasarte sin comer

—Es un día bonito para dormir.

—No es así, si te levantas te daré unas quesadillas.

—¿Con queso verdad?

—Princesa las quesadillas llevan queso.

—Pero esas solo las de queso.

El solo se levanto y se fue fuera del cuarto, no se que dije mal. Me levante y camine hasta mi cuarto buscando mi ropa para ponerme algo después del baño, hice mis necesidades básicas después de un rato subí sacudiendo mi pelo para que se airearse y se secara mas rápido.

—Veo que ya te levantaste, ya te hice tus "quesadillas con queso".

—No entiendo por que le dices así si las quesadillas n llevan queso

—Llevo peleando con Mel por eso desde hace años no le pidas que te explique.

—Tan grave es decirle eso.

—Si, y si te pregunta las quesadillas llevan queso.

Di por alto lo que me dijo disponiéndome a comer y a pensar en todo, mientas el se metía a su oficina. Paso una hora y me levante a lavar los trastes para irme a mi cuarto a acostarme un rato a leer y ver que mas hacia, el día se me hacia muy largo ya que estaba aburrida y no quería dejar de procrastinar ni hacer nada.

Tome mi teléfono y me acosté boca arriba en mi cama, mientas la computadora reproducía música, de repente me entro una llamada y se me tiro el teléfono en la cara asustándome y lastimándome, lo tome nuevamente y conteste.

—¿Bueno?

—Mi amor, ¿Cómo estas?

—Bien mama estoy acostada procrastinando.

—No tienes tarea o si

—Si tengo o no se pero quiero no quiero hacerla.

—Bueno amor, solo informarte que llego mañana a México y posiblemente en la noche a casa

—Espera no ibas a estar un mes fuera

—Se redujo amor, todo se cerro antes de lo esperado y mi jefe ya quiere que nos retiremos al país lo antes posible.