CAPITULO 18

793 36 0
                                    


Yo caminaba de reversa mientras él se acercaba a mí, sostenía suavemente mi cintura.
Miraba fijamente sus ojos, sus hermosos, chocolatosos y tiernos ojos. Los recuerdo igual que hace cuatro años.
Retrocedí y retrocedí hasta que algo me lo impidió, la heladera. Maldije en mi mente, pero no lo saque al aire. Liam sonrió ante mi desesperación por estar acorralada entre sus brazos e inclinó su cabeza, sin cerrar los ojos. No sabía que hacer, simplemente no puedo engañar a Austin, quedaría en mi conciencia por siempre. Sus labios estaban muy cerca de los mios, mi respiración y la suya se mezclaban, su delicioso aroma a hombre invadía mi cuerpo, mis labios pedían acercarse a él, pero mi cabeza me decía “no”.
Con un leve movimiento, tomé una cuchara que tenía a mi alcanza y la planté entre sus labios y los míos. Cerré los ojos con fuerza.
- Aléjate, por favor – le pedí con voz quebrada y abrí los ojos.
Me miró, miró la cuchara y volvió su vista a mi. Me miraba extrañado. Se alejó lentamente de mis labios. Me miraba confundido, como si tuviera una duda en su interior. 
Mi celular comenzó a sonar. Austin.
- ¿Hola? – atendí
- Hola amor 
- Austin – sonreí y miré a Liam, quien revoleó los ojos y apoyó un brazo contra la heladera, contra la cual, seguía “atrapada”.
- ¿Todo bien? – preguntó
- Si, si, todo bien, ¿tu? 
- Bien, llamaba para decirte que tus pertenencias llegaron bien.
- Qué bueno – sonreí, y Liam miraba para otro lado.
- Ahora iré a casa, almorzamos y luego sigo con los trámites del alquiler.
- Hablando de eso, no estoy en casa, cielo – Liam suspiró
- ¿Dónde estas? – dijo Austin, preocupado
- Si, si, estoy en la casa de los chicos 
- ¿Qué chicos? - preguntó intrigado
- Zayn, Harry, Louis, esos chicos – dije
- Ah, bueno, mandales un saludo y llamame cuando quieras que pase a buscarte – dijo
- Está bien, adiós cielo – respondí
- Te amo 
- Yo mas 
- No, yo mas
- No, yo mas, ya corta, ______
- No, corta tú – reí para mí misma.
Liam tomó mi celular y cortó la llamada.
- ¿Qué diablos haces? – pregunté enojada
- Lo que tú no; cortar una simple llamada, ya se estaban poniendo empalagosos – contestó Liam
- ¿Y a ti que te molesta? ¿Tú no haces lo mismo con Danielle? – pregunté 
- No – contestó seco y sonrió sarcástico pero sin despegar sus labios
- ¡Hey, Liam! Ya hablé con Simon, arreglamos que dentro de un mes, haríamos un concierto en Manchester – dijo Niall entrando en la cocina sin dejar de mirar el teléfono que tenía en mano. 
Cuando el rubio subió la mirada y vio que Liam me tenía prácticamente acorralada contra la pared, se quedó duro
- Está bien, creo que no llego en un buen momento – dijo Niall
- No te preocupes, Nialler, Liam ya se iba, ¿no es cierto? – dije entre dientes, mirando a Liam
- No, no lo es – sonrió victorioso
- Pues lo harás ahora – dije y empecé a empujarlo fuera de la cocina mientras lo amenazaba con una cuchara.
Cuando el castaño estuvo fuera de la cocina, me encerré con Niall a cocinar en paz.
Luego de media hora, el almuerzo estuvo preparado, así que lo llevé a la mesa. Los chicos se sentaron hambrientos y le serví a cada uno una porción de mi platillo súper-secreto y ensalada.
- Esto está delicioso – dijo Louis 
- ¡Está riquísimo! ______, cásate conmigo – exclamó Niall y reímos ante su reacción
- No te preocupes, vendré a cocinarte cuando quieras – sonreí
- _____, acompáñanos a comprar los trajes para un baile – preguntó Zayn
- ¿Por qué yo? ¿No tienen estilista o algo así? – pregunté
- En realidad, queremos ir a probar otras cosas y tu tienes buen gusto para ello, ¿nos acompañas? – preguntó Zayn haciendo ojitos
Suspiré.
- Está bien – reí
- ¡Sí! – exclamó Harry
El almuerzo trascurrió entre bromas y risas, anécdotas incluidas. Menos Liam, quien no se esforzó en decir una sola palabra, estaba ido.

la felicidad ( liam payne y tu ) [terminada]  ADAPTADADonde viven las historias. Descúbrelo ahora