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—¿Aun nada?— Decía un chico de cabellera anaranjada mientras miraba a quien sabe donde. Igual no podría llegar a ver algo por la estúpida venda que le habían puesto los doctores esos. El chico en si se sentía aun fatal por no poder ver y que aun no le den de alta.

—Solo en la secundaria Matt. Y sabes bien que los chicos y yo no la tratamos casi.—Respondió su amigo de cabellos castaño oscuro. Su flequillo le tapaba sus ojos completamente no dejando ver su color. El quería ayudarle pero no sabia como decirle que su amiga estaba lastimada por su dicho hace unas semanas. Si, el chico de pecas había tenido que quedarse mas tiempo en ese hospital.

—Quiero verle y escucharle. No me gusto que se halla ido así tan repentino.— Quejo mientras su rostro se decaía. El de flequillo río compasivo, sabia muy bien que su amigo la quería, aunque no lo demostraba le tenia cierto cariño de amistad como para preocuparse por ella.

—Si quieres. Pueda... ¿intentar convencerla?— Sonrió algo nervioso. A lo mejor no trataba a la joven pero admitía que quería ayudar al chico narcisista. El que apenas unos meses atrás se había convertido en un severo admirador de si mismo. Matt descubrió el narcisismo.— Y pensar que fue por ella...

—¿Dijiste algo?— Especulo dudoso mientras intentaba mover su cabeza donde se encontraba el de camisa blanca de secundaria. Con un chaleco verde claro. Eso era lo que tenían que vestir los chicos.

—No nada... Solo que te iba a ayudar a que ella viniera.— Calmo sus nervios para que este no se diera cuenta de su estado.

—Esta bien. Pero recuerda que también debes convencer a Christal. Si no, ¿Como me sentiré vivo aquí? Quiero escucharle mas que sea.— A lo mejor nadie viera sus ojos pero el castaño oscuro los rodó fastidiado por lo dicho y bufo en su lugar. —¿Paso algo?

—No es nada. Solo que me acorde que Tom me pidió que le ayudara con su tarea. Sabes como esta ahora de mal estudiante.— Intento excusarse pero sus palabras no eran para nada mentiras.

  —Pasas mucho tiempo con Tom ¿eh?— El mas bajo se sonrojo hasta la nariz. Odiaba cuando mal pensaban cosas de el y el de cuencas.— A todo esto. ¿Donde esta Tord?

—Como siempre, ligándose a todas las que se encuentra en la secundaria.— Y nuevamente volvió a rodar sus ojos los cuales eran tapados.

—Nunca va ha cambiar ¿verdad?—Movió su cabeza justo frente al artista oculto y si. El del flequillo casi no le gustaba admitir que dibujaba. Era un secreto que solo el y sus amigos sabían.

—No. No lo hará. Y aun sigue diciendo que cuando este más mayor se ira a la gran ciudad. Tu sabes para cumplir sus «Sueños»— Agarro un poco de agua de la mesita alado de la cama de Matt y bebió tranquilamente para luego volver hablar.—Pero ¿sabes? A lo mejor algún día una mujer lo cambie.

Empezaron a reír a carcajadas hasta que a la final cesaron sus risotas por ver como una enfermera los regañaba.

—Si, como no.— Ironizó el mas alto. Empezó a tocar con sus manos y encontró sus lentes.—No creo que pueda volver a utilizarlo.

—Yo... pienso lo mismo.— Sonrió leve mientras tomaba una mano de su amigo.— Espero te mejores Matt. Así volveremos a estar completos.

El solo río en su lugar para luego suspirar.— Te quiero pedir un favor.

«Edd adolescentes es re-lindo. ♥»

Ella seguía caminando depresiva. Aun no podía superar las palabras que le había dicho el de pecas. Se sentía falta y aun mas por no haber ido a visitarlo.

♪Quiero Verte ♪«Matt×Tu» →Eddsworld←Donde viven las historias. Descúbrelo ahora