dos de la madrugada con una muñeca quebrada que duraría unos 40 minutos de dolor regenerarse, perdió su picahielos favorito, ese que compro en ikea porque tenia mango de dinosaurio ¿quien dijo que hay que perder el estilo solo porque la cosa este diseñada para besar el hígado del contrato de turno? como sea, seguía caminando por la peatonal de la 14 y 77, las numeraciones en japón son terriblemen teodiosas, sabían que las manzanas tiene un numero? hay veces que alguien le da su tarjeta y tiene que adivinar si es la dirección o el móvil, sacó el celular del bolsillo interno de la campera para revisar tres veces si estaba yendo bien, tenia el pago de la semana y podría darse un gusto o dos, un bar... pero nada parecido a The RedDot, este estaba mas o menos en regla y tenia todo lo que ella disfrutaba, helado, bailarinas y musica de los 80. al menos los jueves. una ducha y cambio de ropa despues y casi parecía una dama nuevamente, el lugar era bastante modesto aunque bien decorado, tenia cabinas privadas, pista de baile y unos sofás bastante comodos para un lugar que se llena regularmente al tope, se quedo observando todo con un ojo algo criticón para una handiman del tercer mejor club de shunjuku, todo estaba mal, la pista tenia un tipo de loza que al derramarse bebidas harían que la gente se patine con facilidad traducido a incidentes y sangre alcohol y varios para limpiar luego, ¿tenían plantas vivas? ¿cuanto estaban gastando en mantenimiento estos tipos? ni hablar del pobre mantenimiento de la barra, se clavó dos astillas al tomar el tequila de paso, este lugar era una bomba de tiempo, antes que pueda seguir con su critica una mano pasó frente a ella arrastrándola de su collar de metal hasta arrojarla sin mala intención en los asientos de una de las cabinas privadas, algo que la sacó no solo de del trance sino de su zona de confort, usualmente ella era la que hacia ese tipo de cosas, y no hubo golpes ni un balazo como hubiera concluido su accionar, era un joven de perfil atractivo que subía a la pequeña tarima para dar dos vueltase legantes a la barra americana, parecía una de las criaturas danzarinas que solía delirar cuando estaba por caer redonda de ebria, sonrió encogiéndose de hombros, todos los día son para probar algo nuevo, dejo 400 dolares en el pequeño escenario a lo que el , todo delicadeza y seducción se arrodillo frente a ella llevando el torso y cabeza hacia atrás, siguiéndole el juego le fue poniendolos billetes en el cinturón. se levanto en una maniobra estudiada para quedar frente a ella mientras la loba se acomodab aexpectante
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