Strangers 2.0 → Corbyn Besson ✔

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Octubre, 2018

–Lo siento chicos, yo ya me voy a casa. No me siento bien –les dije. Nos encontrábamos en el parque, los cuatro me miraron expectantes pero con rostros de preocupación

– ¿Seguro? ¿Está todo bien? –pregunto Zach

Yo negué –la verdad es que no chicos. No sé si hice algo mal con Kaylee. Todo iba bien y bueno, de la nada todo se derrumbó –hice una mueca

–tranquilo, hermano. Ve a casa y habla con ella a ver qué es lo que sucede –dijo Daniel, yo asentí. Me despedí de los chicos y comencé el recorrido a mi casa

Me puse mis audífonos y puse la playlist en aleatorio, la primera canción en sonar fue you are the reason de Calum Scott y no pude sentirme peor en ese momento

¿Qué había hecho mal? ¿Había sido yo? ¿Kay ya no me quería? ¿Debería hablar con ella o darle su espacio? mis pensamientos se vieron interrumpidos porque alguien tomo de mi brazo y me hiso girar. Lo admito, me asuste demasiado. Pero no pude decir nada ni reaccionar cuando esa persona ya me estaba besando –Wow –dije cuándo nos separamos

–Escúchame, amor. Sé que estos días estuve distante, pero todo tiene su razón. Christina me amenazo para que me separa de ti y tuve que hacerlo hasta encontrar una solución, las chicas me ayudaron y gracias a Dios todo funciono. Enserio, perdóname por hacer que la pasaras tan mal estos días. No fue mi intención...te amo, Corbyn. Te amo como no tienes ni la más remota idea –soltó todo muy rápido y sin más, la bese

–Perdonada, Kaylee –dije cuándo nos separamos –si la pase mal, pero eso ya no importa. Te tengo aquí conmigo, ahora –ella con una gran sonrisa se acercó y me dio un gran abrazo –oh, yo también te amo, nena. Demasiado –le susurre en el oído y supe en ese momento que no necesitaba nada más si la tenía a ella

Nos separamos y ella soltó un suspiro, yo le sonreí – ¿Quieres salir conmigo? –Pregunto, y yo la mire extrañado –digo, a una cita. No hemos podido tener una cita en mucho tiempo –se explico

Volví a sonreírle –ya sé a dónde podemos ir, ¿viniste caminando? –pregunte

Negó –Nop, mi carro esta allá –señalo y efectivamente su jeep estaba estacionado unos metros más allá

–Ven, yo conduzco –le pedí la llave

Ella rio –no, cariño. Es mi Jeep. Si quieres ir a algún lado, yo te llevare –me guiño un ojo y comenzó a caminar, Dios mío...esta mujer me encanta

Inevitablemente, le solté un silbido y ella me miro por encima de su hombro aun de espaldas – ¡esa es mi chica! –exclame

–Ya vamos, tonto –me dijo y yo reí, para luego seguirla hasta el auto

En el camino, hablamos sobre lo que habíamos hecho estos días, ella me conto todo el plan que armo con las chicas con la ayuda de Eleana

– ¿¡A Eleana le gusta Jonah!? –pregunte sorprendido, ella asintió

–así es cariño, y pude notar que si lo quiere –comento

–Wow, cada vez me sorprendo más. ¿Ya se lleva bien con Steph? –pregunte curioso

Ella rio – ¿te soy sincera? hable de eso con ella y me dijo que ella molestaba a Steph a propósito porque le causaba gracia verla enojada. No la odia, pero le divierte hacerla enojar. Créeme, si yo estuviera en su lugar, haría lo mismo –volvió a reír –ver a Steph enojada o estresada, es gracioso. Hasta cierto punto lo es, pero es gracioso

Yo reí –mujeres, ¿Quién las entiende?

–Hombres, ¿Quién los entiende? –rodo los ojos y yo volví a reír

–Te extrañe –dije acariciando su mano, que descansada en la palanca de cambios

–Yo también lo hice, mucho –hiso un puchero

–pues, ya no lo hagas. Aquí me tienes, todo tuyo –le di un beso al torso de su mano y pude notar como sonrió

Lo que resto del camino, solo escuchamos música y disfrutamos de la presencia del otro. Cuando llegamos al zoológico, que era nuestro destino, nos bajamos del auto y nos acercamos a la entrada para poder pasar

Una vez dentro, caminamos por todo el zoológico, viendo a lo diversos animales. En Virginia me gustaba mucho ir a los zoológicos, lastimosamente no había tenido la oportunidad de venir aquí, bueno hasta ahora

– ¡Ese mono se parece a ti! –exclamo viendo a un mono, que raramente tenia cabello rubio encima de su cabeza

Yo la mire haciéndome el ofendido –eso no es lo que se supone que le debe decir una novia a su novio

–lo siento, cariño. Es que enserio si se parecen; es más, acércate para tomarles una foto –me dijo y yo de bien mandado me puse a un lado del mono

Ella tomo la foto y la vi haciendo un par de cosas más –creo que se vería mejor una de nosotros besándonos, ¿no crees? –pregunte y me acerque a ella

Tome su celular entre mis manos, y con la otra la tome de la cintura acercándola a mí y dándole un beso

Cuando nos separamos, dejamos nuestras frentes pegadas y sonreímos –Te amo, Kaylee Harries –le dije sin bajar el celular y sin dejar de grabar

–Te amo mucho más, Corbyn Besson –me dijo y se acercó a darme otro beso, más corto esta vez