Park ChaeYoung siempre ha estado llena de problemas, se siente sola a pesar de tener a grandes amigos, vive una relación toxica bastante codependiente, muy en sus adentros lo sabe pero se niega a tomar las riendas de la situación hasta que es demasi...
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Eran casi las 11 de la mañana, ella despertó poco a poco y se encontró con el rostro de Veam bastante cerca al de ella, sintió un cosquilleo en su estómago y sin pensarlo dos veces lo besó lentamente, sonrió optimista creyendo que todo iba a mejorar de ahora en adelante, pues se iba a proponer a no molestar a Veam o hacer cosas que lo alteren. Se levantó de la cama y se dio una ducha, al salir él ya estaba despierto mirando su móvil aun recostado en la cama.
-¿Cómo amaneciste? –quiso ser amable con él pero él ni siquiera la miró, ella frunció los labios y bajó la mirada, era evidente que no iba a cambiar de la noche a la mañana así que trató de no molestarlo. Ella siguió en lo suyo, buscó su ropa y se cambió para salir a la cocina a preparar algo rico para los dos.
Abrió las ventanas para que se refrescara el departamento, a pesar de ser un departamento barato tenía una vista bastante bonita, pues estaba en el último piso del edificio brindándoles una vista panorámica de casi 360° a Seúl. Veam salió de la habitación bastante apesadumbrado para sentarse en la barra de la cocina como esperando a ser servido, ella de inmediato le dio su desayuno y este empezó a comer sin dejar de ver su celular.
-¿qué tal está? –ella hizo otro intento de entablar una conversación como antes, como cuando él se entusiasmaba con todo lo que ella hacía por él. Eran buenos tiempos que al parecer ya no iban a volver.
-mmmh –gesticuló sin mirarla, ella suspiró fuerte sintiéndose vencida.
-¿iras hoy a vernos tocar? –tenía esperanzas de que por fin fuera a verla tocar en su grupo.
-ChaeYoung... por favor déjame desayunar –la miraba al fin con enfado.
-solo quiero saber...
-no lo sé... no me esperes tengo muchas cosas que hacer –decía con enfado mientras terminaba su desayuno levantándose para ir al baño dejándola a ella de nuevo sola. Después de unos minutos salió del baño para después escuchar que salía del departamento, quiso llorar, pero suspiró hondamente para contenerse, recogió los platos los lavó y salió rumbo al bar donde tocarían nuevamente esa noche.
Llegó con un semblante de hartazgo como ya era algo usual en ella, nadie se atrevió a preguntar que le pasaba porque era evidente lo que le pasaba, ni siquiera Lisa que había ido desde temprano para darles apoyo como siempre lo hacía.
-¿dormiste bien? MyungSoo preguntó tímidamente mientras veía a Rosé sacar su instrumento del estuche.
-bien, gracias –decía casi inexpresiva mientras seguía en lo que estaba, era obvio que sabían que todo esto era por Veam pero no querían ni nombrarlo.
-bien pues hay que ensayar –JaeBeom decía entusiasmado mientras tomaba las baquetas para dirigirse a su batería. ChaeYoung con enfado conectó y preparó todo, ensayaron unas cuantas canciones que tocarían para esa noche y descansaron hasta que se llegara la hora del show, todos fueron por ramen para comer algo una hora antes de la presentación, fue ahí cuando Lisa tocó el tema.
-¿llegó al departamento? –le preguntaba mientras soplaba su sopa.
-sí... -todos miraron de golpe a Rosé-
-¿y que paso? ¿Discutieron otra vez? –JB se interesaba.
-no... -para ella era algo normal el comportamiento que Veam tenía con ella y ya no lo veía como una discusión.
-¿Dónde estaba? Llego borracho otra vez ¿cierto? –L seguía con las preguntas incomodas.
-no me dijo dónde estaba, si llegó un poco tomado, pero está bien –trató de sonreír.
-¿no te hizo daño? –Lisa la miraba preocupada.
-claro que no, él sería incapaz de hacerme daño –todos guardaron silencio pues no querían decirle que lo que estaba haciendo él la estaba dañando.
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