Imposible Posibilidad

10: El primer beso

He pasado varios días con Amy y Stalin en su casa desde que recuerdo ya estoy durmiendo en mi habitación desde ese día que dormí en la cama de Stalin por esa causa extraña que desconozco tengo miedo de llegar al colegio hoy por Santiago, estos días no ha llegado porque "ha tenido fiebre" pero creo que hoy vendrá aunque yo no me trago el cuento de la fiebre, de pronto una chica de cabello negro me despierta de mis pensamientos.

-¿Qué? - digo frotandome los ojos porque todavía tengo sueño.

-Ya vamos al colegio - dijo con cara de obviedad.

-¿Y Stalin? - dije viendo que no está.

- El no podrá venir hoy al colegio ya que tiene cosas más importantes que hacer.

-¡¿Más importante que el colegio?! - dije extrañada.

- Sí...

- Bueno...

Fuimos al colegio y yo trato de saber que cosas se fue a hacer Stalin.

Llegue a mi clase era algo temprano y Amy solo dejo su mochila y se fue a no se donde, yo estoy sentada sola en el aula hasta que unos pasos me interrumpieron regrese a ver y vi a David Betancourt inmediatamente mi rostro se torno serio y el dejo su mochila y se acercó a mi sentándose en el asiento de Amy.

-¿Qué quieres, Betancourt? - dije con la voz más grave que me salio.

-Solo quería pedirte perdón por lo que paso - dijo y su rostro se notaba realmente arrepentido pero quise asegurarme.

-Tranquilo... - dije tomándole el hombro con centrándome y notando que estaba arrepentido.

-¿Estoy perdonado? - dijo con una cara distinta que nunca había nacido de el.

-Por supuesto - dije con una leve sonrisa y vi como de sus labios nació un bella y sincera sonrisa.

-Gracias - dijo con emoción y se fue.

Me alegro que ya no tenga enemigos pero todavía sigo pensando en Stalin ¿Tal vez este en ese mundo del que el me hablo? Bueno no puedo mentir que esta semana ha sido aburrida pero esto me ha sacado de la rutina a parte se que no he hablado con papá... Espera lo llamaré. Tomé mi teléfono y marque el número de mi padre al tercer timbre contesto.

-¿Aló? ¿nena? - dijo la voz de mi padre.

-¡Papi! - dije emocionada al escuchar su voz.

-Hola mi princesa ¿Cómo has estado?

-Bien aunque algo aburrida... Bueno muy aburrida - escuche una carcajada de su parte acompañada de una emoción y alegría gigante.

-Supongo ¿Oye?

-¿Qué?

-Stalin... ¿Está por allá? - pregunto algo preocupado.

-No, Amy dijo que había tenido cosas importantes que hacer.

-No es posible, maldición - lo escuche murmurar.

-¿Pasa algo?

- No nena, cuidate mucho no hagas caso a los extraños y en especial extrañas, estarás acompañada de Amy o de tus amigos pero cuando Stalin vuelva tienes que estar siempre con el - me aconsejo -Bye mi princesa cuidate.

-Adiós papi cuidate - dije y corte la llamada.

Esto se ha tornado raro mi padre como un genio me ha preguntado sobre Stalin como si el supiera que el no esta conmigo de pronto veo unas chispas de luz que van abriéndose en círculo y de ahí sale Stalin con ese uniforme negro y raro que usa siempre en mis sueños pero esta cubierto la cara pero se que es él, lleva dos espadas cruzadas en X en su espalda y algunas armas más eso me recuerda a las tortugas ninjas.