Capítulo 10 ~ Sebastián.

31 1 0
                                    

Capítulo 10 ~ Sebastián (Christopher).

Desperté, era Sábado por la mañana, me senté en mi cama y tomé mi teléfono, tres mensajes de Sebastián.

"Hola, hermoso."

"¿Crees que podamos vernos?"

"Creo que tenemos que hablar."

¿Qué? ¿De qué quiere hablar?

Creo que no sería buena idea ir...

Pero aún así... Me da curiosidad saber qué me quiere decir....

"¿De qué quieres hablar?"

Oh, Dios... Esto es muy malo.

Bajé y mi mamá no estaba, no estoy seguro en qué trabaje pero casi nunca está en casa.

Preparé pan con mantequilla y mermelada, puse jugo de naranja en un vaso y me senté en una silla.

Mi teléfono vibra, era él.

"No puedo decirte hasta verte, por favor, es importante."

Mh... ¿Qué hago?

"¿Dónde nos vemos?"

No, no, espera, qué estás haciendo... Esto es muy...

"Dirección adjuntada."

"Voy para allá en una hora."

Bueno, no he sido del todo sincero, Sebastián y yo tuvimos una aventura, en los últimos meses de la secundaria estuve con él, fuimos algo como novios, sí, ya di mi primer beso y fue con él...

Estar con él fue hermoso, hasta que me engañó y lo terminé o algo así.

Quise desaparecer esa parte de mi vida, pero eso es imposible.

Me bañé y me puse cualquier cosa linda que encontré, tomé la bicicleta y fui hasta donde él estaba.

- Hola. - sonrió.

- Hola. - dije frío.

- ¿Cómo estás? - dijo tocándome el hombro.

- Sólo dime por qué querías verme.

Él suspiró.

- Será mejor que nos sentemos.

Nos acercamos al jardín y nos sentamos, me sentía muy extraño... Realmente tenía un mal presentimiento sobre todo esto y creo que lo que sea que vaya a ser debo tomarlo maduramente.

- Ok... Mira, Christopher, sé que lo que pasó fue horrible, a veces simplemente me pongo a llorar por todo lo que te hice y lo lamento, en serio, no lo digo sólo por decir, lo siento, me siento muy arrepentido... Pero realmente no te pedí que vinieras para rogarte que volvamos.

Lo miraba a los ojos y sabía que algo malo estaba pasando, analizaba sus movimientos, podía notar la tensión y el nerviosismo. Miro a sus ojos y sus ojos se llenan de lagrimas. Escucho un quiebre.

- Tengo VIH.

El mundo se silencia, se quiebra y se parte en mil, mi cuerpo se siente frío y siento que ya no estoy.
El tiempo parece haberse parado.
Pero no.

- Yo...

Sólo lo abracé. El lloraba inconsolablemente. Yo no podía sentir. A duras penas podía moverme, sentía mi mundo completamente destruido.

Hablamos sobre eso, estuvimos muchas horas juntos y al final del día regresé a mi casa.

Me tiré en mi cama...
Veo mi teléfono y tenía un mensaje dd César, no me sentía con ánimos de verlo o contestarle.
No soy de las personas que lloran, no soy de las personas que sufren por los demás, pero sinceramente me se tía flotando en el espacio, en mi interior sé que Sebastián ya quedó atrás, pero no puedes ignorar algo así de la persona que algún día te hizo feliz.

A veces, cuando siento que he cambiado y que soy diferente a como era antes, hay algo que me regresa y me hace ver que por más que cambie mi presente y planee mi futuro, mi pasado sigue y seguirá igual.

Querido amor.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora