Directo del Corazón (Straight From The Heart)

Capítulo 21 - 29 de agosto (2)

Viernes, 29 de agosto (2)

Finalmente, Alex afloja ligeramente su agarre y permite que sus brazos se deslicen por cuerpo de Piper. Ella mueve sus manos hacia la cara de la otra mujer, sosteniéndola suavemente, una palma en cada mejilla. Se miran la una a la otra, las palabras no pronunciadas flotan entre ellas. Alex cierra el espacio que las separa y presiona sus labios suavemente contra los de Piper.

Solo les toma un momento profundizar el beso, los labios de Piper se separan en el instante en que siente la suavidad de la lengua de Alex tocándolos y una de ellas gime, pero ninguna está segura de quién. Alex rompe el beso y apoya su frente contra el hombro de Piper con los ojos cerrados.

Sus brazos se abren paso alrededor del cuerpo de Piper y la abrazan.

"No quiero dejarte ir", susurra.

"Nunca lo hagas", respira Piper en respuesta.

"Hueles tan bien", Alex murmura contra el cuello de Piper, unos segundos más tarde.

Piper se ríe. "Huelo como alguien que no se ha duchado durante más de treinta y seis horas Al. Pero gracias por el cumplido".

Alex retrocede y mira a Piper.

"¿Qué diablos estás haciendo aquí?" ella pregunta, sus manos moviéndose hacia los bíceps de Piper.

"¿Sorpresa?"

"¡Joder sí, que es una sorpresa! Pero en serio, ¿Qué? ¿Cómo?"

"Te dije que esperaba estar en casa para el Día del Trabajo", se encoge de hombros. "Y lo estaré."

"¡Estás antes!"

"Solo por unos días. Si es un problema, siempre me puedo ir...", dice en broma, alejándose y medio volteándose hacia la puerta.

"No lo creo", responde Alex, acercándola nuevamente. "No creo que vaya a dejar que te vayas nunca".

Piper sonríe mientras envuelve sus brazos alrededor de la cintura de Alex. "Funciona para mí", murmura en su hombro.

Cuando Alex la libera, ella toma su mano. "Vamos, vamos arriba, para que me cuentes exactamente cómo ha pasado este regreso anticipado. Parece que John decidió que cerraríamos temprano hoy".

Piper sonríe mientras levanta su bolsa de lona y deja que Alex la guie a través de la puerta del área de personal de la tienda y suban las escaleras.

"Parece agradable".

"Sí, es un buen chico".

"Me dio un recorrido por la tienda mientras te esperaba".

"Creo que es un poco diferente a las giras a las que estás acostumbrada".

Piper sonríe un poco. "Para él también."

Alex hace una pausa cuando llega a la puerta interna de su departamento y mira a Piper. "¿Huh?"

"Es un veterano, no?"

Los ojos de Alex se ensanchan sorprendidos. "¿Lo es?"

"Sí. Primera Infantería", dijo.

"¿Qué? No lo sé ¿Cómo lo sabes?"

Piper sonríe. "Bueno, cuando llamó mi atención y tan pronto como entré en la tienda se dirigió a mí como Capitán , esa fue mi primera pista".

Alex sacude la cabeza, desconcertada. "No tenía idea", murmura, mientras empuja la puerta de su apartamento para abrirla.

Piper la sigue adentro, sus ojos escanean automáticamente la habitación. Están en una sala de estar grande e iluminada, con techos altos y un enorme sofá en forma de L que se ubica alrededor de una mesa baja. Hay un televisor montado en una de las paredes y la otra está forrada con estanterías empotradas del piso al techo que claramente no son suficientes para contener todos los libros que Alex posee. Hay un escritorio antiguo en una esquina y una puerta que da a un pasillo. La habitación tiene dos grandes ventanales que dan a la calle, uno de los cuales tiene un asiento incorporado con una multitud de cojines apilados.