-Está bien, tu lo has querido- me dice envolviendose en llamas azules. Yo en respuesta le gruño, me sentía extraño, mis ganas de matar a alguien aumentaban por momentos.
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narra Yuki:
Estaba haciendole creer que le hiba a atacar, pero no era así. Tienía algo planeado, que, si no funcionaba yo y alguien más híbamos a salir muy mal parados.
Salí corriendo hacia él prepado para "atacar". En ese momento me acordé de lo que me dijo mi padre hacie tiempo: "aberigua cosas de su pasado cuando lo encuentres, la primera vez es posible pararle, pero debes averiguar como, encuentra algo que él quiera a toda costa".
Yo ya sabía lo que él quería, asique me abalancé hacia el para darselo. Algo que ahora mismo solo yo podía darselo.
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narra Riku:
Se abalanzaba a mi velozmente preparado para atacarme, o eso creía. Antes de que yo pudiera reaccionar, él ya estaba sobre mí. Abrazandome.
Mis ganas de matar a alguien disminuyeron de golpe, eso me había tranquilizado bastante.
El monstruo en el que me había convertido desapareció por completo, ahora mismo era yo envuelto en un abrazo de Yuki. Se sentía calido, me sentía protejido. Y aunque fuera un poco, me estaba dando cariño. Algo que jamás en mis 17 años, había experimentado.
Lágrimas salieron de mis ojos, mi ojo que ahora estaba al descubierto, se volvió de color rojo, pero un rojo suave y cálido. Mi ojo otro verde estaba cristalizado por aquella acción dejando escapar algunas lágrimas.
-Todo está bien - me decía Yuki susurrandome en el oido -No estas solo- me seguía susurrando, era la primera vez que alguien me hacía una muestra de cariño, dejé que mis lágrimas escaparan de mis ojos sin control, sollozando, enterrando mi rostro en su pecho. Él me respondió apretandome más aún.
Era la primera vez que me sentía así delante de una persona, tan vulnerable y frágil. Pero sentía que podía confiar en el.
-Este es mi primer abrazo- le digo en un susurro, asugerándome que me pueda escuchar. Podía sentir su cara de sorpresa. No me sorprendía nada, es extraño que alguien en sus 17 años de vida, jamás haya tenido un solo gesto de cariño con alguien, ni si quiera con sus padres.
Siento comos mis parpados pesan cada vez más hasta que me quedo dormido. No se porqué pero esta es la noche más tranquila de mi vida, normalmente las paso con pesadillas, sin poder dormir nada.
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narra Yuki:
Siento que su respiración se tranquiliza, se va quedando dormido poco a poco, decido llevarlo a su casa, para que descanse, ya que se le vé bastante cansado.
Me lo subo a la espalda con cuidado para que se despierte, pero por suerte tiene el sueño muy pesado, o eso creo, o esta demasiado cansado.
Entro en su casa utilizando sus llaves para entrar. Subo a las escaleras con cuidado de no caernos. Entro a su habitación -"bonita habitación"- pienso. Lo dejo con cuidado sobre la cama.
Lo veo muy bulnerable y tierno. Su respiración es tranquila, y tiene las mejillas sonrojadas, dándole un aspecto más tierno. Su boca está ligeramente abierta, y tiene el pelo alborotado dandole otro toque tierno, dejándole ver la marca negra que tiene debajo del ojo izquierdo.
Veo como empieza a moverse intranquilo, pero yo inmediatamente me acuesto a su lado, pasandole el brazo por encima suya haciendo que su rostro se apoye un poco en mi pecho, y apretándolo en modo de abrazo.
Escucho como su respiración se tranquiliza en cuanto le abrazo -"vaya, a este chico no le han dado nada de cariño"- pienso con el ceño fruncido pensando en como sebe ser eso.
Yo también me quedo profundamente dormido mientras que pienso. Podría jurar que esta fue la noche más cálida de mi vida.
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olaaa!! q tal , os gusto? espero q si ;P solo quería abisarles de que de vez en cuando escribiré desde el punto de vista de Yuki, ya que e pensado que quedaría mejor desde su punto de vista.
El de la foto es Riku (si se ve si no decirmelo porfa)
p.d: sorry por las faltas de ortografíaa
bsss
