Capítulo 7.

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Jinhwan se encontraba sentado en uno de los sofás de la sala. Las piernas muy juntas para evitar que estas temblaran, los ojos clavados en el suelo y con un extraño malestar en el estómago.

En algún momento, le pidió a Junhoe que prefería quedarse en el auto y esperar a que su ex se fuera, pero este se había negado, pues según él aquella mujer ya lo había visto y no tenía caso actuar de esa forma, pues ella podía malinterpretar todo.

No era como si a Junhoe le importara la opinión de ella, simplemente no quería discutir, que le reclamara cosas sin sentido que de alguna manera habían terminado con su relación. Cosas que a veces lo hacían sentir culpable.

Sin embargo, para Jinhwan la situación era sumamente incomoda. Pues entre el antiguo matrimonio era palpable la tensión, casi tan densa como las profundidades del océano que comenzaba alzarse como una tormenta, donde él se encontraba en medio de aquella posible tempestad.

La ex esposa del doctor Koo, había tomado asiento en el sofá que estaba frente al castaño.

Aquella mujer era completamente perfecta, del tipo con la que alguien como el doctor se casaría. El concepto de mujer hermosa había encarnado en ella, sus largas piernas cruzadas, un semblante orgulloso y elegante acompañaban correctamente sus delicados rasgos y blanca piel.

Ella miraba aquel joven con una curiosidad insana, no iba aceptarlo, pero de alguna manera ese chico representaba un intruso en la que había sido su casa, parecía que su ex marido empezaba a superar el divorcio más rápido que ella y desde luego eso le molestaba.

El silencio era horriblemente incomodo, nadie parecía querer hablar y aquello no tenía sentido. Pero era evidente que el doctor Koo se encontraba más molesto con la inesperada visita, por lo que fue el primero en romper con el sofocante silencio.

–Y bien, ¿qué haces aquí, Sun Hee?- Preguntó Koo con la voz cargada de molestia.

–¿Estás seguro de querer hablar frente de tu... invitado?- Cuestionó ella, sin poder ocultar que la presencia de Jinhwan la fastidiaba.

–Sólo di qué haces aquí, por favor.

–Mi abogado encontró algunas lagunas en las clausulas del divorcio, pidió una cita para hablarlo con tu abogado, pero él dijo que tú no quieres hablar nada sobre el tema. Así que vine personalmente hablarlo contigo.- Los ojos gatunos de ella cayeron sobre el castaño, revisando con atención la reacción del joven ante sus palabras. Pero él no parecía estar conmocionado o interesado, más bien, parecía alguien ajeno -en todo sentido- a lo que pasaba.

–Es por el seguro de vida ¿no es así? Siempre encuentras una anomalía en un acuerdo que ya firmaste. Es cansado ¿sabes?- Dijo Junhoe, mientras caminaba por la estancia. –Te daré una cita con mi abogado, le pago lo suficiente como para entretenerlo con tus nuevas quejas. ¿Cuándo podré deshacerme de ti? Estamos divorciados y sigues alrededor de mí.

El delicado rostro de la mujer se tensó, visiblemente ofendida y avergonzada. Abrió la boca para decir algo, pero aquel reclamo la había dejado sin palabras.

Jinhwan pensó que era un poco triste que las cosas acabaran así para ellos, pues en algún momento estuvieron casados, por profundas e importantes razones unieron sus vidas, pero ahora claramente, no quedaba nada de eso entre ellos.

–Tienes el tacto de un animal, Junhoe, ¿cuándo vas a cambiar?- Dijo ella mientras se ponía de pie, pero la curiosidad morbosa la hizo volver su mirada hacia el joven desconocido. –¿Estas saliendo con él? Has bajado tus estándares.

It's only a game. JunHwan- iKONWhere stories live. Discover now