La Última Noche

Capítulo Uno

Es la primera noche que paso sin él.

La primera noche que estoy sola después de tanto tiempo.

No puedo conciliar el sueño y solo puedo pensar en Matías, en si volverá, en si fue cosa de solo un día o esto durará más tiempo, pero si sigo acostada pensando y tratando de unir cabos me voy a enloquecer.

Me levantó y me cambio, salgo por la ventana de mi habitación y bajo por el árbol, no se a donde ir, pero no quiero quedarme pensando en lo que pudo ser.
Llego a nuestro lugar, es un precipicio en el que solía sentarme a pensar y a hablar con Matías, siempre fue especial para nosotros pero ahora solo trae recuerdos, imagino que está sentado junto a mí mirando a las estrellas como cada noche que pasábamos juntos, cada momento con él era perfecto y todavía no logro entender que fue lo que sucedió, tal vez no era nuestro momento pero nunca lo sabré hasta que vuelva; al menos ahora lo tengo, no es real pero es él y eso es más que suficiente para sentirme mejor.

Al final vuelvo a casa un tanto más calmada porque pude verlo, subo por las ramas del árbol y entro a mi habitación, sin cambiarme me acuesto y me hundo en mis pensamientos. Logré quedarme dormida, pero incluso en mis sueños no pude dejar de pensar en él, en como estaba conmigo de una u otra forma.
Al despertar la casa estaba vacía como cada mañana, mis padres ya habían salido a su trabajo, trate de alistarme rápido y salí a la escuela en donde me esperaba Stella mi mejor amiga.

-¡Hey! Estabas perdida, ¿que te pasó?- Dijo Stella con una sonrisa.

-Nada, solo algo cansada, no he dormido bien- Dije con la mirada perdida- No he sabido nada de Matías y me preocupa cada vez más.

- Tranquila, pronto saldrán noticias de él, sabes que no es tú culpa ¿verdad?.

-Lo sé, pero algo tuve que hacer para que se fuera, no se iría sin más, de eso estoy segura.

-Layla no vas a lograr nada culpándote y no hay forma de que te ayude si no me dices que sucedió la última vez que se vieron.

-Nada, literalmente nada, todo transcurrió normal, era como cada noche pero al siguiente día no supe de él.- Le digo analizando cada momento- No se que sucedió.

-Ok, mírame, no lograrás nada poniéndote así.

Íbamos caminando hacia el aula de clase, creí verlo en el pasillo pero no era él.

Las clases fueron aburridas como siempre, sin Matías no logro concentrarme, él es todo lo que necesito.
Lamento no haberle dicho lo que siento por él en su momento, cuando seguía aquí, tal vez él sentía lo mismo por mí, pero es algo que no sabré.

No se si vuelva, pero debería intentar encontrarlo, aunque tenga que buscar por cielo y tierra, aunque deba buscar hasta debajo de las rocas lo encontraré, haré que vuelva y que me diga por qué hizo eso.